Muestran fuerza

La marcha convocada por el rector de la UABC, Daniel Octavio Valdez Delgadillo, reunió a alrededor de 35 mil personas de la comunidad cimarrona en la explanada de los Tres Poderes, para exigir el pago de los mil 500 millones de pesos.

La marcha reunió a estudiantes de Mexicali y su valle, así como algunas ciudades del Estado, académicos, personal administrativo, padres de familia y egresados de la máxima casa de estudios, quienes salieron de tres puntos distintos de la Ciudad y que finalmente se encontraron en Centro Cívico.

En el contingente también se pudo apreciar a Maestros del SETE, así como sindicalizados del sector salud que se unieron a la caminata que salió de Rectoría hacia Centro Cívico; ya en el lugar también se vio a miembros de Mexicali Resiste.

Algo que llamó la atención fue la organización y cuidado que tuvieron los estudiantes de la Facultad de Ciencias Administrativas que incluso iban con una delimitación con cinta de “precaución”, así como varios cartelones diferenciando el grupo al que pertenecían.

Ya en la explanada, el rector acudió al Congreso del Estado para presentar una solicitud de Juicio Político contra el gobernador del Estado, Francisco Vega de Lamadrid, e informar que se puso una denuncia ante la Fiscalía General de la República por peculado y posteriormente subió al templete colocado para dar un mensaje a la comunidad cimarrona en la que reiteró la solicitud de juicio político.

Por su parte, el Gobierno del Estado mediante un comunicado se señaló respetuoso de la manifestación universitaria y reiteró que seguirá gestionando los recursos ante la Federación para realizar el pago.

Informaron que el Estado se ha visto imposibilitado para entregar la misma cantidad que otorga la Federación derivado de la falta de recursos federales extraordinarios durante el último año de Enrique Peña Nieto.

La UABC mostró el poder de convocatoria y organización al reunir a miles de personas en Centro Cívico, y hay que decirlo, que muchos de los universitarios se mostraron orgullosos de participar y apoyar moralmente a su alma mater.

Mal augurio

A quien no le auguran mucho tiempo al frente de la Policía Municipal de Rosarito es a Francisco Arellano, quien fue traído directamente desde Michoacán con la promesa de que sería secretario y no director de la corporación, como ocurrió.

Quienes saben de esto aseguran que ha puesto el grito en el cielo tras enterarse de las verdaderas condiciones en las que se encuentra la corporación, ya que los policías en activo apenas si rebasan los 200 elementos y además, el equipamiento de patrullas y otros elementos necesarios para cumplir su tarea son por decirlo de alguna manera, escasos.

Aunado a ello parece que el salario tampoco se ajustará a sus pretensiones, pues el anterior director, Hilario Muñoz, ganaba 50 mil pesos mensuales y convertir la dirección a secretaría para percibir un poco más no será nada sencillo, ya que durante el gobierno de Javier Robles, tuvo que deshacerse de esa pesada losa porque no se cumplían los requisitos en número de habitantes, ni policías, para que esta dependencia pudiera seguir ostentándose como secretaría y recibir los apoyos federales del Fortaseg.

Por si fuera poco, los empresarios ya han empezado a quejarse, pues no se ha visto ningún acercamiento con él y los problemas de inseguridad siguen creciendo como la espuma.