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Los mexicanos no somos tacos

“Los políticos son siempre lo mismo. Prometen construir un puente aunque no haya río.” NIKITA JRUSHCHOV

Las desafortunadas declaraciones de la esposa del presidente Biden, Jill Biden, quien queriendo halagar a la población latina en San Antonio Texas, a propósito de la conferencia anual de “UnidosUS”, que antes era conocida como el Consejo Nacional de la Raza, se refirió a que los latinos eran tan únicos como los “tacos de desayuno”, lo cual provocó todo tipo de críticas que la obligaron a ofrecer disculpas públicas por su mal comentario.

Recordemos que la ciudad de San Antonio es una de las ciudades con mayor población latina. De sus casi millón y medio de habitantes, según los datos del Censo de Estados Unidos, el 65% de ellos son hispanos y en contrasentido, Texas es uno de los estados que más los discrimina, empezando por su gobernador, Greg Abbott, el cual pertenece al ala más conservadora del Partido Republicano, conocida como el Tea Party.

Efectivamente, el gobernador Abbott, de religión católico y casado con la mexicana-estadounidense Cecilia Phalen Abbott, nieta de inmigrantes mexicanos, se ha dedicado a atacar a los inmigrantes que viven en Texas, promueve abiertamente el uso de armas de todo tipo y ha sido un acérrimo enemigo de Obama primero y ahora de Biden a quienes ha buscado atacarlos en todo momento.

Por ello, en un intento por ganar la simpatía de la población de origen latina de esa zona de Texas, Jill Biden cometió el error de comparar a nuestra población con tacos, lo cual despertó más molestias que halagos y todo esto en la víspera de la visita del presidente López Obrador a los Estados Unidos.

No olvidemos que en noviembre próximo habrá elecciones en los Estados Unidos para renovar a 34 de los 100 integrantes del Senado y que todo apunta a que el partido demócrata va a perder fuerza en esta elección de medio tiempo, lo cual abre poco a poco más la puerta para el regreso del nefasto de Donald Trump en el 2024.

Por ello el tema del aborto, junto con otros controversiales, han sido tan mencionados últimamente, al grado de que muchos consideran que la posición frente al aborto podría definir el rumbo de las elecciones de noviembre.

Lo cierto es que conforme avanzan los meses, lamentablemente, se ve que el presidente Biden continúa perdiendo popularidad, al grado de que algunas encuestas, a dos años de distancia, ya lo colocan, en el mejor de los casos, en empate técnico con Trump y otras casas encuestadoras inclusive le dan un porcentaje de votos menor al que tendría Trump de lanzarse nuevamente.

Por ello, Biden y su equipo están lanzando toda serie de estrategias para recuperar el terreno electoral perdido y afianzarse, primero en este noviembre, para no perder senadores de su partido y desde luego, preparándose para la reelección en 2 años más.

Nada está escrito todavía, pero es posible que, de la visita del presidente de México, busquen sacar algún beneficio estratégico que les sume en el casillero electoral más votos para la ansiada reelección.

Por lo pronto, la comunidad latina en Texas, no se quedó contenta con Jill Biden y su comentario sobre los tacos y los latinos.

Como vemos, la política es igual en todos los países, lo que me recuerda la famosa frase del expresidente Ronald Reagan que decía: “La política es la segunda profesión más antigua de la historia, aunque a veces creo que se parece mucho a la primera. “

*- El autor es asesor empresarial en cabildeo.

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