Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / Columna Tijuana

¿Lo habremos visto todo ya?

Mañana se cumplen cuarenta años de la muerte de John Lennon. Tenía cuarenta años y había compuesto ese año la canción "La vida comienza a los cuarenta", qué paradoja.

Mañana se cumplen cuarenta años de la muerte de John Lennon. Tenía cuarenta años y había compuesto ese año la canción "La vida comienza a los cuarenta", qué paradoja. Nota para los seguidores de los Beatles, me aligero el día escribiendo sobre el cuarteto más conocido, pero muy olvidada su música. Los tiempos cambian, los gustos también. Cuando en el consultorio les pregunto a los jóvenes qué música escuchan, y si son músicos qué genero tocan, me llama muchísimo la atención la gran cantidad de músicos jóvenes que saben mucho sobre The Beatles, que a partir del Sargento Pimienta se llamarán simplemente Beatles.

Life begins at forty, "La vida comienza a los cuarenta", es una canción de John muy poco conocida, dedicada a Ringo y es el equivalente al Rocky Raccoon de Paul, al Honey Don't (Carl Perkins) de Ringo o el mismo estilo de George en la guitarra: el género country magistralmente interpretado. Hay country en la obra de los cuatro, sin embargo, Lennon no se caracterizaba por ello y eso hace sorprendente esta canción.

Nunca la grabó con intenciones de publicarla él, era para la voz de Ringo, un regalo de cumpleaños para colaborar en un futuro disco de Ringo. Parecida historia tuvo la canción escrita poco antes de que asesinaran a Lennon, esa sí se grabó, pero fue publicada tres años después de su muerte: Nobody Told Me, mucho me ha resonado en la cabeza la estrofa donde dice Nobody told me there'd be days like these, strange days indeed.

Resulta tan surreal como ominoso la necesidad de cubrir las exhalaciones en público, los que lo vemos así somos los que usamos cubre bocas, los que no usan mascarilla es porque la pandemia no les produce ese efecto. No usarla es un reflejo tanto de la ideología como de la psicología del individuo.

Llama la atención que la militancia anticubrebocas provenga de la derecha, psicológicamente sugiere rasgos psicópatas o para decirlo suave, pobre empatía o franca ignorancia. Hago un esfuerzo y regreso a los Beatles, la muerte de Lennon fue un antes y un después para la generación Baby Boomer, sobre todo para los fanáticos que vivimos cada estreno, desde el primero hasta el último. Tendría que escribir otra columna para explicar un recuerdo que me atormenta, cuando tuve en mis manos un boleto para verlos en Madrid, circa 1965. La música que escuchamos en la adolescencia nos marca de por vida, me preocupa, como buen viejo, la pobre calidad de la música de moda. Extraños tiempos sin duda, finalmente pienso en el título de una canción de Bachman-Turner Overdrive, muy sarcásticamente decembrina: You ain't seen nothing yet.

* El autor es siquiatra y ejerce en Tijuana.

En esta nota