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La recuperación del turismo

Está de más decirlo, pero uno de los sectores que más afectado se verá por esta pandemia es el turismo y toda su cadena de valor.

Está de más decirlo, pero uno de los sectores que más afectado se verá por esta pandemia es el turismo y toda su cadena de valor.

Las premisas fundamentales del turismo, la reunión, la diversión, el traslado, son cosas que tardarán en “normalizarse”, ya que todo implica un contacto humano muy fuerte y puede resultar contraproducente para la contención adecuada de la pandemia.

Aún cuando hay países que ya se aprestan a levantar la cuarentena, la industria ha anunciado ya su inminente y tardía recuperación, simplemente por la caída en la proyecciones de viaje en los siguientes meses y sin aerolíneas en pleno funcionamiento, lo demás se visualiza por añadidura.

Pensaba en estos días pasados en que era el momento de la promoción, por ejemplo, de todos los eventos de verano en el corredor turístico y el valle de Guadalupe. Ninguno de los múltiples eventos de vendimia se ha anunciado con una fecha final y algunos ya simplemente no se harán, como el Festival Viñedos en Flor, el evento que anuncia la pronta cosecha de la uva.

Un momento duro para el turismo, sin duda, que tendrá que pensar en varias cosas para lograr la subsistencia de las empresas. Primero, en asegurar la continuidad de las operaciones utilizando sus ahorros o los apoyos prometidos desde el Gobierno y otras instancias (poco claros aún)y segundo, preparándose para reabrir con protocolos de sanitización y prevención del contagio, cuando menos los primeros meses.

No me imagino un bar, una alberca, un concierto o un evento de ciudad en el que se pudiera cuidar la sana distancia, por ejemplo. Así que eso quizás dure un poco más en que el visitante tenga la confianza para visitarlos. Ahí tendremos que trabajar mucho mas, no solo en la psique del visitante para recuperar su confianza plena, sino en llevar a la práctica una nueva cultura de acceso a los espacios, de permanencia en ellos y el crear una atmósfera de tranquilidad para la salud de los usuarios.

En ese mismo tenor de complicación veo a otras actividades muy relevantes del sector turístico como los parques temáticos, los cruceros, los museos y tours guiados. Aun cuando parques emblemáticos en California ya anunciaron su apertura, me parece que los futuros visitantes tomarán con cautela el uso de sus instalaciones.

La gastronomía, más orientada al manejo higiénico de los alimentos, podrá salvar la cara primero porque podrán separar mesas y preparar a su personal de cocina y servicio es relativamente más sencillo, pero tendrá que acostumbrarse a la limpieza extrema de superficies del lugar, la constante higiene de baños y áreas comunes y en general, al cuidado extremo de la vajilla, la cristalería y el plaqué.

Visualizo un boom comercial en los hoteles pequeños, los llamados boutique y los espacios privados en bares y terrazas. Creo que al principio serán los que garantizarían las mejores prácticas de higiene, aunque la hotelería es otro sector que es más sencillo cuidar las medidas higiénicas pertinentes.

El otro día escuchaba de funcionarios de destinos turísticos muy importantes del país, que hay una planeación extrema de sus actividades promocionales para los siguientes meses, pero todos enfocando baterías a la preparación de la planta productiva, de forma tal que las acciones promocionales vayan de la mano con los servicios que el visitante reciba. Así que tendremos un bombardeo promocional de muchas ciudades a nivel nacional e internacional, por lo que va a valer la pena la compra anticipada de paquetes con buenos descuentos que seguramente incentivarán al sector.

Soy optimista y espero que esta contención de viajes y reuniones que actualmente tenemos, explote la necesidad del ser humano por reunirse, por conocer y explorar nuevas cosas en su región y en el mundo. Sería, sin duda, una buena noticia para el turismo y las miles de empresas y millones de empleos que se generan, no solo en un país como México sino en un centenar de ellos que sus economías dependen tanto de sus ingresos y divisas.

Mientras, los servidores turísticos debemos prepararnos con mejores productos para el visitante, donde la experiencia que viva el usuario, le permita recomendarnos y le despierte las ganas de repetir lo vivido.

* El autor es empresario, turistólogo y un enamorado de su ciudad

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