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Idiotas Útiles

Somos lo que Hacemos 

La base de cualquier democracia es el equilibrio de los poderes que conforman al Estado, se sustenta en la autonomía de cada uno de mismos, en el respeto a su independencia, así como en su configuración que se traduce en límites y contrapesos. Su resultado da cohesión y configuración al Estado moderno.


Uno de los retos más importantes para nuestro país será superar la forma en la que Andrés Manuel López Obrador maneja su investidura presidencial; en tres años de gobierno ha pasado del “estas junto a mí o en mi contra” al asumir que el Estado es él, sus decisiones y su óptica de país; amenaza y sentencia al amparo de asumir que él encabeza la conseja que forma y da pulso a nuestra sociedad.

Ahora reniega reunirse con los padres de los niños con cáncer y sin medicamentos con el pretexto de que no le falten el respeto a la investidura presidencial, hasta iniciar claramente con un linchamiento inducido hacia el INE para que durante los próximos tres años el pueblo sabio, ese que se deja seducir por tantas mentiras y estupidez, termine culpando al INE por defender la democracia que le permitió a su principal denostador público, el propio presidente, serlo por ser esa institución el garante de las elecciones en nuestro país.


Esta semana compareció Lorenzo Córdova, presidente del INE ante la Cámara de Diputados, su comparecencia fue un vivo retrato de la forma en la que hoy día se hace política en nuestro país, ver la horda de idiotas útiles de MORENA sin argumento alguno más allá de la estupidez del comentario vacío, vulgar, mal informado y mal intencionado de diputados que no terminan por entender que ellos están ahí no porque Andrés Manuel lo haya decidido, sino porque nuestro país tiene ya 30 años construyendo día con día un sistema electoral que respeta la voluntad personal a través del sufragio de cada uno de los mexicanos que deciden hacerlo durante las jornadas electorales; por ello desde el año 2006 he reprobado la batea de babas de AMLO cuando afirma que las elecciones fueron un fraude, faltándole con ello el respeto a poco más de un millón de mexicanos que participamos en la jornada contando los votos. Ver al pobre diablo del diputado Catón Zetina dar una clase de soberbia, mal gusto y estupidez fue el corolario que resume la idiotez de un puñado de tontos útiles que tienen secuestrado el dialogo en la Cámara de Diputados.


Así como el Congreso de la Unión hoy está dominado por simples levantadedos más ocupados en agradarle al presidente que con la construcción de un mejor futuro para nuestro país; nuestro estado no ha sido ajeno a ello ya que durante los últimos 8 años no ha habido división de poderes, con Kiko Vega y Jaime Bonilla hubo tal vez las tres legislaturas más serviles de nuestra historia; el Congreso del estado estuvo al servicio del gobernador en turno, tanto que hasta hubo 21 lamesuelas que aprobaron la ley Bonilla, esa que de no haber sido vetada por la Suprema Corte le hubiera impedido a Marina ser gobernadora, lo dicho antes: una bola de idiotas útiles que poco aportan más allá de la estulticia de quedar bien con el gobernante en turno.

* El autor es empresario y ex dirigente de Coparmex Mexicali.

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