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Hank y la mayoría silenciosa

Como siempre sucede en todas las campañas políticas, los partidos políticos y sus candidatos se dan por ganadores “cacareando” un carro completo que no existe... 

Como siempre sucede en todas las campañas políticas, los partidos políticos y sus candidatos se dan por ganadores “cacareando” un carro completo que no existe, tratando de ubicar esa idea en el “imaginario colectivo”, nadie reconoce que va perdiendo, menos que no obtendrá el carro completo, sobretodo viniendo del partido en el poder. Especialmente, después de que utilizan toda la maquinaria del estado para refrendar su estancia en la administración pública aplicando todos los recursos disponibles para lograr el triunfo. Viene esto a cuento por la llegada del dirigente nacional de Morena que declaró públicamente que Marina del Pilar ganaría 3 a 1 a su más cercano competidor y por ello obtendría de calle la elección a gobernador.

El triunfalismo de Mario Delgado de Morena, contrasta con lo que muchas personas perciben acerca de los diferentes candidatos de ese partido. El malestar causado por el “perverso” desempeño del gobierno actual ha calado hondo en él “en la sociedad” de la entidad, sobre todo por la intentona de expropiar el campestre de Tijuana que atenta contra la “propiedad privada”, y la descortesía que han recibido los encargados de generar riqueza por parte de la autoridad, son aspectos negativos que se suman a otros que están impactando en el ánimo del electorado. No solo la clase empresarial se siente agraviada e ignorada, sino también otros sectores como los campesinos, los pescadores, los prestadores de servicios que han sido dejados a la deriva, la desatención es permanente y se amplía a toda la entidad. De igual forma, habría que sumarle el descontento con la designación de candidaturas, que han disminuido la confianza en Morena, más el uso “faccioso de la justicia” para atacar a los adversarios que ocupan los primeros lugares en las preferencias electorales.

Nunca revelan las fuentes de la información de las “famosas encuestas”, más bien las utilizan como una campaña mediática para vender la idea al electorado que van de punteros en la elección. Existe una incongruencia que expresa la “mayoría silenciosa”, ese grupo de personas que no pronuncian sus opiniones públicamente. Es un sector del electorado que no suele participar en marchas, no exterioriza su apoyo a un candidato en especial, no muestra su descontento cuando lo tiene y rara vez participa en una encuesta. Se sabe que existe, pero nunca se puede anticipar su nivel de participación en cada ciclo electoral y menos por quién votarán. El electorado de Baja California ha sido “eclipsado” en los medios por una minoría más vocal, más “ruidosa” y públicamente más expuesta a favor de la 4T y su rechazo hacia otros partidos, pero de igual manera, la oposición forma parte de esas minorías que hacen mucho ruido y enardecen las redes sociales a tal grado que a veces algunos temas los “transforma” en “virales” y han estado penetrando en la “moral” de los “desesperanzados” que conforman la mayoría silenciosa. Las granjas de “BOTS” es un medio para que la información se haga viral, pero los consumidores de estos mensajes rara vez se percatan de la intencionalidad y a medida que pasa el tiempo van tomando conciencia del objetivo que se persigue con estos mensajes. Las “mayorías silenciosas” han aprendido muy bien la lección. Si le regalas algo, lo recibe con gusto, pero eso no quiere decir que votará por ti, más bien hay mucha gente educada que no te lo dice pero su pensamiento no está contigo, la gente no es tonta y sabe que lo están “engañando”. El ejemplo de los diputados reeleccionistas que piden el voto y la “mayoría silenciosa” dice que sí votará por ellos, para evitar “careos” sabiendo que estas personas no tienen vergüenza. Las “mayorías silenciosas” inclinarán la balanza hacia el PES, permaneciendo callada habrá de causar asombro el día de la elección, nadie dice nada, no muestran sus preferencias, está harta de tantas promesas incumplidas. Algunos analistas vaticinan que Jorge Hank ganará la gubernatura. Morena obtendría algunas presidencias municipales, diputaciones federales y locales, pero jamás el “carro completo” que tanto han alardeado. El clamor es generalizado, es votar por un cambio, por una persona que cumpla sus promesas, que venga a poner orden, que apoye la inversión y garantice la propiedad privada, la educación y la seguridad ciudadana.

*- El autor es economista egresado de la UABC.

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