Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / Columna Tijuana

Fin del invierno

A dos semanas de finalizar el invierno, visitamos una de las regiones más remotas del Desierto  de San Felipe.

A dos semanas de finalizar el invierno, visitamos una de las regiones más remotas del Desierto de San Felipe. En el nuevo libro que sobre borrego cimarrón estamos haciendo mi hermano Armando y Yo, proponemos designar como los barrios del borrego a espacios en los que podemos distinguir sutiles diferencias tanto en el paisaje, como en la forma, tamaño y color de los cimarrones que en ellos viven. Es un trabajo de historia cinegética, de los recuerdos, registros, anécdotas, testimonios y estadísticas desde que se empezó a cazar al Símbolo de Baja California en 1963 a 1989 que fue la última temporada de caza antes de la veda virtual de 1990.

Nos aproximamos al corazón del que llamamos “barrio arroyojaquelense”, que comprende las cañadas de Arroyo Grande, Jaquejel, Arroyo de Enmedio y la Sierra de Las Tinajas, B.C. Pero después de 35 años de haber recorrido esta región, la erosión de torrenciales lluvias impidieron el paso de nuestro comboy de doble tracción, incluso hasta para el vehículo especializado CAN AM del Dr. Sergio Romo. Quizá se requieran otras tres o cuatro décadas para que otras avenidas de agua cubran con arena las enormes rocas que no pudimos sortear esta vez.

Pero todos disfrutamos la amistad, cocina y pasión por el desierto en una primavera adelantada. Los ocotillos ya tenían hojas y algunos sus flores rojas, como las del chamizo chuparrosa. Partes del suelo empiezan a cubrirse de golondrina, esa alfombrilla de diminutas flores blancas que adornan el paisaje. Lo más notorio son las encelias con sus atractivas flores amarillas incluso escoltando la carretera entre El Mayor y Las Pintas. Los arroyos, secos por supuesto, están adornados y aromatizados con la lavanda del desierto. Trituré algunas flores y los compañeros se sorprendieron del rico aroma que despiden. El único sonido era el de varias especies de abejas que aprovechan el polen de sus flores.

Encontramos una planta que nunca habíamos visto en este desierto. Es como un espárrago que emerge de la arena y florece de morado. El Dr. Jon Rebman del Museo de San Diego opina que se trata de Aphyllon coperii, un curioso parásito que explota a otras plantas con conexiones subterráneas. Los parásitos siempre encuentran maneras de vivir de otros. En esta región existen vestigios de un camino antiguo que no aparece en nuestra historia. La revista Desert Magazine de El Centro, California, publicada en los años treinta, alguna vez publicó que fue hecho por soldados estadounidenses para comunicar a San Felipe con San Diego, en caso de una amenaza de Japón por ese flanco, durante la Segunda Guerra Mundial. Nosotros lo llamamos el Camino de los Soldados. Sube Sierra de Juárez por la cuesta del Ejido Jamau, B.C.

Las piedras encaladas que lo escoltan creíamos que fueron pintadas por aquella tropa, pero una paciente observación nos llevó a constatar que se trata de un caliche natural, ya que las hay muy lejos de esta histórica y desconocida rúa. Fotos de una primavera adelantada en FB.

En esta nota