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Estudio de escritura

“Para entender por qué cada uno de nosotros escribimos diferente analicemos las leyes que proponen Solange Pellat y el decálogo de Félix del Val Latierro.

“Para entender por qué cada uno de nosotros escribimos diferente analicemos las leyes que proponen Solange Pellat y el decálogo de Félix del Val Latierro.

Primero las leyes: 1ª Ley, el gesto gráfico está sometido a la influencia inmediata del cerebro. El órgano que escribe no modifica la forma de aquel si funciona normalmente y está lo bastante adaptado a su función; 2ª Ley, cuando uno escribe, el yo está en acción, pero el sentimiento, caso inconsciente de esta actuación pasa por alternativas continuas de intensidad y debilidad. Adquiere el máximo de intensidad y debilidad; 3ª Ley, no se puede modificar voluntariamente, en un momento dado, la escritura natural más que dejando en su trazado la señal del esfuerzo realizado por lograr el cambio; 4ª Ley, el que escribe en circunstancias en que el acto de escribir es particularmente difícil traza instintivamente, o bien forma las letras que le son más habituales, o bien formas más sencillas y fáciles de construir; 5ª Ley, cada individuo posee una escritura que le es propia y que se diferencia de las demás.

Por su parte Félix del Val Latierro, refiere en su decálogo: 1.- El alma y el grafismo están en relación permanente de causa y efecto; 2.- El alma es un complejo infinito; y así como no hay dos almas iguales, tampoco existen dos grafismos iguales; 3.- El complejo anímico se modifica por el complejo fisiológico: Tonalidad nerviosa, muscular y glandular, el cual reviste igualmente una variedad infinita, por lo que resulta, si así puede decirse, un infinito modificado por otro infinito; 4.- El complejo anímico y la tonalidad general fisiológica definen o determinan la fisonomía del escrito, independientemente del órgano que la ejecuta, si éste está adaptado a la función (ambidextros, zurdos, reeducados), e independientemente también del alfabeto empleado (latino, griego, eslavo, germano, árabe, etc.); 5.- Los estados de conciencia, pasajeros o permanentes, repercuten en el grafismo, así como las variaciones de la tonalidad general (Experiencia de Ferrari, Hericourt y Richet.); 6.- La escritura es inicialmente acto volitivo, pero con predominio, casi absoluto, del subconsciente, lo que explica la permanencia y fijeza de las peculiaridades gráficas; 7.- No se puede simular la propia grafía sin que se note el esfuerzo de la lucha contra el subconsciente; 8.- Nadie puede disimular simultáneamente todos los elementos de su grafía, ni siquiera la mitad de ellos, lo cual es una consecuencia de lo anterior avalada por la experiencia. (Saudek.); 9.- Por mucho que lo pretenda el falsificador o el disimulador, es imposible, en escritos extensos, que el subconsciente no le juegue alguna mala pasada, revelando la verdadera personalidad del escrito falsificado o disimulado y 10.- No todos los signos gráficos tienen el mismo valor, los más importantes son aquellos que son invisibles o poco aparentes, pues son los que escapan lo mismo en la imitación que en el disimulo.

Otra de las leyes del grafismo: coincidencia total = falsedad.

Estas leyes se aplican como principio y posteriormente vendrá un análisis, comprensión y cotejo, como estudio integral.

*El autor es Coordinador del Área Pericial del Instituto INJUS.

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