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El tesoro perdido de los ayuntamientos

Intencionalmente en algunas de nuestras ciudades, cada ayuntamiento es y ha sido omiso en el cabal cumplimiento de las disposiciones a las que los obliga la Ley del Catastro Inmobiliario del Estado de Baja California

Intencionalmente en algunas de nuestras ciudades, cada ayuntamiento es y ha sido omiso en el cabal cumplimiento de las disposiciones a las que los obliga la Ley del Catastro Inmobiliario del Estado de Baja California, en detrimento de las arcas municipales y afectando directamente sus posibilidades de atender correctamente los servicios públicos que está obligado a prestar. Por ejemplo, las mismas autoridades de Mexicali han reconocido que el valor catastral de los inmuebles que sirven como base para calcular el impuesto predial que cada año tenemos que pagar y significa el ingreso propio mas importante para la administración municipal, está subvaluado hasta en un 70%; En Tijuana, el continuar erróneamente calculando el valor catastral incluyendo solo el 25% por ciento del valor de las construcciones, provoca una generalizada evasión en el pago del impuesto predial, que se hace mucho más grave y evidente en los grandes edificios como naves industriales, grandes centros comerciales y muy particularmente en los edificios más altos, tan en auge en nuestra ciudad. En una ciudad como la nuestra, donde su futuro desarrollo es predominantemente vertical, esto termina beneficiando, injustamente, a quienes mas pueden y deben pagar.

El Instituto Mexicano para la Competitividad, en su estudio índice de Competitividad Urbana 2016 menciona que “Los municipios no han logrado romper su dependencia financiera de la federación, lo cual los vuelve más vulnerables a los shocks macroeconómicos, al mismo tiempo que no han logrado establecer un verdadero vínculo con la ciudadanía. Antes de la reelección municipal era prácticamente imposible realizar una reforma al predial ya que tres años de gobierno no alcanzaba para cosechar sus beneficios. Con la reelección y la posible ampliación del horizonte de gobierno a seis años existen más incentivos para que los alcaldes implementen una estrategia como ésta y así poder contar con más recursos para elevar el nivel de los servicios e infraestructura pública. Para lograr una reforma al predial será necesario superar tres barreras: 1) la técnica, que se refiere principalmente a la modernización de los catastros y su vinculación a los registros públicos de propiedad, 2) la política, donde es necesario romper el círculo vicioso de la cultura del “no pago” y “no cobro”, y 3) la normativa, en donde en la práctica son nulos los incentivos que la federación y los estados dan para que los municipios se esfuercen por mejorar la recaudación del predial.”

De estas tres barreras arriba mencionadas, la primera que es la técnica, está suficientemente bien salvada por lo menos en Mexicali y Tijuana, ya que desde los últimos 27 años se han hecho importantes trabajos que han permitido tener información muy completa que permitiría, incluso para el año fiscal 2021, corregir el rumbo hacia una aplicación correcta del impuesto predial, que permitiría de inmediato fortalecer las finanzas de los ayuntamientos y así revertir la tendencia predominante actual donde los rezagos en la prestación de servicios públicos municipales crecen año con año. Sólo falta la voluntad política de los alcaldes y sus cabildos para hacer lo correcto, diseñar una estrategia sólida capaz de generar resultados en el corto plazo, basada en el uso de la tecnología, la profesionalización de cuadros, la participación ciudadana, la transparencia y la rendición de cuentas que nos permitirá transitar hacia mejores servicios públicos que traerán mayor bienestar y prosperidad en nuestras ciudades. Ojalá se animen, por el bien de todos.

Todos podemos aportar un poco más…

* El autor es arquitecto tijuanense, pro ciudades compactas.

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