Definen dirigencias municipales

El Partido Acción Nacional en Baja California realizó ayer domingo asamblea para definir sus dirigencias en Mexicali, Tecate, Ensenada, Tijuana y Playas de Rosarito, por lo que en cada municipio se llevó a cabo la votación.

En la capital del Estado, el elegido fue Jesús Alejandro Cota Montes, dejando en el camino a Nicolás Quintero Russel y Emanuel Mendoza Gómez.

Durante los últimos días se pudo ver a algunos ex dirigentes estatales pidiendo el voto para Cota, argumentando que se necesitaba sangre nueva que guiará los destinos del Partido en Mexicali y no los mismos de siempre que llevarían al partido a los mismos resultados que en las pasadas elecciones.

Mientras que en Tijuana, Christopher Domínguez se impuso en la contienda ante Julio Benítez Flores y

Luis Rodolfo Enríquez Martínez, a pesar de que Enríquez Martínez ahora ex dirigente municipal se las veía ya como dirigente

y pasó del primer a último lugar en la contienda. En Tijuana la cosa estuvo un poco más intensa, ya que en los días previos se desató una campaña negra en contra de Domínguez y Benítez; pero parece que las figuras del panismo estaban dispuesta a cambiar las cosas ya

que en la votación se pudo ver a personajes como José

Guadalupe Osuna Millán quien según comentan fue de

los que apoyó al joven Domínguez. En Playas de Rosarito, la próxima dirigente del blanquiazul

será América Soto, quien le ganó la contienda a Nancy Verónica Ramírez Ramírez.

En Ensenada, María del Carmen Iñíguez Casanova será la próxima

dirigente al ganarle la contienda a Azalea Nohemí Ziga Alcaraz.

Mientras que en Tecate hubo candidata única, siendo Juana María Nahoul Porras la próxima dirigente.

Con esto el PAN en los municipios deja ya la base que deberá organizar al partido de cara a las próximas elecciones a desarrollarse en el 2024 en la que se elegirá Presidente de la República, Senadores, alcaldes y diputados federales y locales.

SERVICIO ELEMENTAL

Desde hace varias semanas no sirven los dos elevadores para el público y para los empleados del edificio del Centro de Justicia Baja California, ubicados en la vialidad del Río Nuevo, en la capital bajacaliforniana, sin que parezca haber interés en que operen de nuevo.

Se debe recordar que ese edificio fue estrenado a finales del 2010 cuando se echó a andar el llamado en ese tiempo Nuevo Sistema de Justicia Penal, y ahí quedaron instalados los Juzgados para el sistema de justicia adversarial, así como el Centro Estatal de Justicia Alternativa y las Unidades del Ministerio Público de la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado, ahora Fiscalía General del Estado.

Los mismos empleados dicen que en sus primeros años, el entonces procurador estatal Rommel Moreno Manjarrez quiso darle el impulso necesario para cambiar la imagen de la justicia bajacaliforniana, por lo que el edificio se mantenía funcional e incluso hasta los agentes del Ministerio Público y los policías ministeriales tenían que andar trajeados.

Ahora, a poco más de dos lustros de inaugurado, parece que el edificio no recibe el mantenimiento necesario y los usuarios que tienen necesidad de acudir a alguna audiencia o Unidad del Ministerio Público pasan las de Caín para llegar a los pisos superiores. Ni se diga las personas discapacitadas, o de la tercera edad o simplemente quienes no tienen una condición física óptima.

Quién sabe a quién le toque el mantenimiento de ese inmueble, si es a la FGE de Ricardo Iván Carpio, o al Poder Judicial del Estado de Alejandro Isaac Fragozo. Pero lo que sí es cierto es que esos pequeños grandes detalles, como los inservibles elevadores, o los baños sucios, o incluso la falta de una letra en el letrero del edificio, dan mala imagen para todo el aparato de justicia estatal.