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Altares de tecnología muerta

México tiene una de las festividades de más asombro en el mundo, no es cualquier festejo..

México tiene una de las festividades de más asombro en el mundo, no es cualquier festejo; son días de fiesta para conmemorar la partida de nuestros seres queridos, colándose también los que no lo eran tanto; en estas fechas los panteones se llenan de colores y cambian sus oscuras y solitarias fachadas por auténticas fiestas familiares donde la luz de las velas y el sonido de los tríos, mariachis o bandas son parte importante de la celebración.



Todo el país festeja a mi paisana la Catrina de formas muy originales y únicas, cada región agrega su toque especial para crear sus altares: parte fundamental de este homenaje a la muerte para celebrar la vida.



Instalar el altar de muertos se ha convertido en todo un ritual para las familias mexicanas que siguen esta centenaria tradición, mezcla de cosmovisiones culturales, que muchas veces se bifurcan.



La puerta del altar representa la entrada al mundo de los muertos y suele adornarse con flor de cempasúchil, fruta e incluso hay quienes le cuelgan panes; el pan es el alimento para las ánimas y suele ser degustado en familia al término de la festividad; el agua no puede faltar ya que calma la sed de las almas que están en camino; dentro debe contener imágenes, figuras o fotografías de lo que se pretende recordar y ya no existe; las flores de zempoalxóchitl y la de terciopelo son las más comunes en los altares; se dice que su aroma guía a los espíritus al mundo de los vivos; desde la época prehispánica se le atribuye al copal el poder de purificar el ambiente, por ello es esencial; siempre se colocan alimentos, frutas y bebidas; la luz de velas, cirios o veladoras es un requisito básico; ya que guía a los espíritus camino a sus hogares e ilumina su camino de regreso; el papel que decora las ofrendas representa la alegría por la visita de los fallecidos y simboliza el viento; ciertos altares tienen por lo menos dos niveles, que representan la tierra y el cielo y el más común de siete que serían los pasos para llegar al cielo.



Esta asombrosa festividad que se ha ganado la atención en el mundo al grado de llevar sus tradiciones a la pantalla en varias películas y muchas versiones tiene como referencia la relación de los hombres con su espiritualidad y el mundo de los muertos; es por esto que me llamó gratamente la relación de un altar de muertos que se exhibió en el patio del Palacio Municipal de la ciudad de Mexicali: un altar de muertos con toda la parafernalia requerida pero dedicado a la tecnología, en ese altar se encontraban tocadiscos de 33 y 45 revoluciones, televisores de bulbos, computadoras obsoletas, etc. con el implícito mensaje de su muerte sin aparente retorno.



Ahora reflexionemos que se levantaron las ofrendas y se retiraron los muertos adultos y angelitos; ahora toca lo más difícil: valorar a los vivos antes de verlos en fotografías para tener que recordarlos.

* El autor es coordinador del área pericial del Injus.

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