Inician huelga de hambre 10 mujeres integrantes de la caravana migrante

Un grupo de mujeres de la caravana migrante centroamericana inició su huelga de hambre para exigir a las autoridades estadounidenses que reciban más solicitudes de asilo humanitario de Estados Unidos y que el trámite para obtenerlo sea más rápido.

De acuerdo a esta parte del éxodo, las autoridades estadounidenses solo reciben 40 peticiones diarias, por lo que esperan aumentarla a 50.

Pero antes de la llegada de los migrantes centroamericanos, otro grupo de más de mil personas de diferentes nacionalidades desde hace dos meses espera su turno para ser atendido.

La prohibición de la ingesta de alimentos la obedecieron 10 mujeres a las 13 horas de ayer, quienes pretendieron realizar una manifestación afuera de las oficinas de migración mexicana de El Chaparral para que también aceleren su permiso de estancia en el País.

Sin embargo, más de una docena de elementos de la Policía Federal junto con el Instituto Nacional de Migración, les cerró el paso para evitar que llegaran a la zona del cruce fronterizo internacional Tijuana-San Ysidro.

Bajo la lluvia y frío las participantes con niños en brazos insistieron en el respeto de su decisión, pues dijeron estar preparadas para afrontar los siguientes días sin probar bocados.

“No tenemos miedo, simplemente es un derecho. Hemos tomado la decisión y lo haremos. No hay peor cosa que venir caminando y aguantando hambre de Honduras hasta Guatemala. Las lluvias y todo eso no nos perjudican”, dijo Olga, de Honduras.

Las mujeres huelguistas aclararon que no fueron incitadas por hombres de la caravana o por líderes, por lo que Irineo Mujica, director de la asociación internacional migrante Pueblo Sin Fronteras, se deslizó de la medida.

“Ellos se pusieron en riesgo desde que salieron de su país. Si ellos han decidido una manifestación o la huelga de hambre, nosotros no podemos decirles que no. Yo he hecho muchas huelgas de hambre y la verdad es un arma y es una manera muy visible de pedir a Dios que nos ayude y que nos dé la mano”, declaró.

Antes del cierre del paso el activista tuvo un enfrentamiento verbal con los elementos de la policía federal, quienes le pidieron que convencieran a los migrantes para que regresaran al albergue de la Unidad Deportiva y no arriesgaran más su salud.

Mientras esto sucedía, las mujeres de migrantes y algunos hombres iniciaron cantos cristianos para conmover a las autoridades para que les abrieran el paso, pero eso no sucedió.

“Que nos den una oportunidad para llegar a El Chaparral para que nos escuchen como mujeres. Y demostrarles que venimos de manera pacífica. Esta huelga de hambre se la ofrezco a mi Dios para que nos ayude”, platicó Claudia ‘N’, de Honduras.