Connacionales persisten por visa humanitaria
A pesar de que la salud de los niños se puede complicar, más de 150 connacionales de Guerrero, Michoacán y Chiapas se niegan a retirarse de El Chaparral, pues desde el pasado domingo esperan el turno para solicitar su asilo humanitario en Estados Unidos.
Las familias explicaron que abandonaron sus hogares debido a las amenazas de muerte de parte de los grupos de secuestradores y cobro de piso.
Con tan solo la información de redes sociales los connacionales llegaron directo al cruce peatonal entre Tijuana y Estados Unidos, donde se unieron a la Caravana Migrante.
Así, los mexicanos también instalaron casas de campaña e improvisaron otras para que los niños y mujeres durmieran en el sitio, quienes al paso de los días se enfermaron de gripa y tos, principalmente.
Por ello, César Aníbal Palencia Chávez, titular de la Dirección de Atención al Migrante, se presentó en el lugar para convencer a los connacionales que ingresen a los albergues instalados para ellos.
Sin embargo, pocos accedieron, pues el presenciar que la mayoría de centroamericanos sí logró iniciar su trámite de asilo los motiva a permanecer en El Chaparral.
De manera oficial no se ha dado a conocer cuántos mexicanos han sido atendidos por los agentes de migración americana.