El hombre del sombrero

En uno de los puntos más antiguos de la Ciudad hay un espíritu que vigila a sus residentes, al parecer se trata de un vecino que por motivos desconocidos se preocupa por el bienestar de los demás.

El Callejón Zeta, ubicado en la Zona Norte, a unos metros de Estados Unidos, fue donde se colocaron los primeros cimientos de Tijuana, no solo casas sino también oficinas gubernamentales.

Por ello no es extraño que en ese punto existan historias increíbles y algunos de los residentes más antiguos de esa zona recordaron una, “El hombre del sombrero”.

Señalaron que ha habido personas que observaron la sombra de un hombre alto, que usa un sombrero y que camina por las calles, obviamente por la noche, y siempre se aparece cuando alguien está a solas.

Los residentes coincidieron en que las primeras veces que lo vieron sintieron un pánico incontrolable, ya que se ve la sombra erguida que no se mueve de su lugar y de repente comienza a acercarse.

Por ello muchos de ellos señalaron que salieron corriendo, inmediatamente se refugiaron en sus casas y denunciaron el hecho; pero cuando salían con más vecinos ya no encontraron nada, el hombre del sombrero había desaparecido.

Historia común

Poco a poco, luego de comparar sus experiencias, quienes viven en y alrededor del Callejón Zeta se dieron cuenta que “El hombre del sombrero” era un fantasma, un espíritu, por lo que no debían temerle.

Fue entonces que las personas comenzaron a detenerse al momento que veían la sombra del hombre con sombrero, aunque aún con algo de miedo.

Quienes tuvieron la valentía de esperarse señalaron que escuchaban una voz, sin saber de dónde salía, que les preguntaba “¿cómo estás?”.

“Yo recuerdo que mi madre me decía que el hombre se les acercaba y les preguntaba que cómo estaban, que eso era lo que les decía, la verdad a mí no me consta, pero se decía”, dijo Manuel González, comerciante se esa zona desde hace más de 30 años.

También hubo quienes señalaron que la persona debió ser residente de esa parte de Tijuana, por ello su obsesión de estar muy pendiente de las personas se encuentran en el Callejón Zeta.

Debido al estilo del sombrero, ya que es descrito como largo, los mismos moradores han señalado que la persona debió haber sido de los primeros pobladores, de principios del siglo 20.

En el Callejón Zeta se instaló la primera aduana de México en 1874, pero una inundación la destruyó y se perdieron los documentos, también los misioneros utilizaban esta ruta para ir a San Diego.

Actualmente parece que el Callejón Zeta estaba abandonado y ha sido azotado por la delincuencia que lo rodea, como son los robos, así como las personas que se dedican a la venta de drogas, sin olvidar los homicidios.

Pero al menos algunos de sus vecinos se sienten tranquilos porque cuentan con “El hombre del sombrero”, un eterno vigilante de la Zona Norte y Callejón Zeta.

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