Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas /

Recordando a John Lennon

Hoy se cumplen 45 años del asesinato de John Lennon, no puedo dejar de escribir sobre ello.

Ricardo  Menéndez

Hoy se cumplen 45 años del asesinato de John Lennon, no puedo dejar de escribir sobre ello. Parece que fue ayer, estoy lo suficientemente viejo como para recordar con dolor ese día, fue un personaje con el que crecí, quiero decir que cuando tenía 12 años escuché el primer disco de los Beatles, y cuando tenía 19 recuerdo el impacto que me causó saber de su separación. Lennon lidereó al grupo, lo formó, revolucionó a una generación y el legado musical está aún muy vigente. Difícil imaginar todo lo que encabezó para la generación joven en su momento. Su activismo en favor de la paz enfrentó a la guerra de Vietnam, en su momento el presidente Nixon intentó expulsarlo, como lo haría hoy Trump. Además de sus geniales letras escribió libros y recibió unos de los más importantes premios de literatura en su momento. No tuvo mayor educación, a los 15 años abandonó el interés por la escuela y formó su primera banda, para los 19 era expulsado por rebelde y se va de Liverpool a Alemania para tocar hasta ocho horas diarias en clubes de mala muerte, allí desarrolló sus habilidades, con pura práctica y sin formación musical. Se generó un cerebro musical al que muchos músicos jóvenes aún le rinden tributo y le dan crédito. Mi lectura acerca de él es la de una persona que tenía muchas inseguridades, se quitaba los lentes para tocar en público, aunque casi no viera, de ello que una mujer lo pudo atrapar convenciéndolo de lo grandioso que era, al mismo tiempo de someter su machismo, y de paso su persona. La famosa Yoko Ono, quien aún sigue haciendo mafufadas en el mundo del arte, lo deslumbró imaginando a una gran artista, a un gran intelectual, lo acabó de enceguecer. Qué si Yoko separó a los

Beatles, por supuesto que sí, la idea fue de ella, él la ejecutó. Lo metió en una trayectoria distinta, pasó del rebelde al mandilón, comulgando con tonterías como posar los dos desnudos para portada de disco, no llegó a producir nada genial a su lado, su última obra maestra, Imagine, en realidad fue compuesta aún en la banda, aunque la lanzara en solitario. Ella también lo llevó a exponerse demasiado y pasear por Nueva York sin protección a pesar de ser la persona más famosa del mundo, caro le salió afirmar que era más famoso que Jesús, si lo fue. Un admirador psicótico le disparó por la espalda. Desde entonces muchos venimos diciendo: si Lennon viviera… Estaban cerca de reunirse como banda cuando murió, muchos de mi generación deben recordar en dónde estaban cuando se enteraron. Yo, como muchos otros, lloré, aún lo extraño.

  •  *- El autor es siquiatra y ejerce en Tijuana.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

HISTORIAS