Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas /

7 años

Se cumple un año de la llegada a la Presidencia de la República de Claudia Sheinbaum Pardo (CSP). Siete años del inicio de los gobiernos emanados de MORENA.

Victor Alejandro  Espinoza

Se cumple un año de la llegada a la Presidencia de la República de Claudia Sheinbaum Pardo (CSP). Siete años del inicio de los gobiernos emanados de MORENA. En 2018 inició formalmente la transición hacia un régimen económico y político diferente a lo que habíamos vivido desde 1982.

Durante 36 años los gobiernos del PRI y del PAN impulsaron un modelo económico que luego sería llamado Neoliberal. Los resultados de las políticas neoliberales se tradujeron en una terrible concentración de la riqueza en muy pocas manos y en el empobrecimiento de la mayoría de los mexicanos. Para impulsar dicho modelo se requirió asimismo el uso autoritario del poder político y el control de los principales medios de comunicación.

La explicación a los actos de corrupción y saqueo a la Nación fue que quienes fallaban eran las personas al frente de las instituciones. Era culpa de los “malos” ciudadanos, pero el modelo no era responsable. PRI y PAN comparten ese diagnóstico. No había que hacer grandes ajustes, solo permitir una “transición política” que permitiera cierta apertura y que se centrara en mejor los procedimientos electorales.

Sin embargo, la polarización económica y social continuó su curso y después de tres intentos luchando contra la adversidad, los aparatos gubernamentales y los medios de comunicación tradicionales, fue tal la movilización ciudadana que fue imposible el fraude electoral para impedir el triunfo de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en las elecciones de 2018.

En esa transición, los medios de comunicación alternativos y redes sociales jugaron un papel fundamental para quebrar la narrativa de que AMLO era un “peligro para México”. Entre otros polítólogos Robert Dahl, nos recuerda que la existencia de medios alternativos de comunicación son un requisito para poder hablar de democracia. De 2018 a 2024 se vivió una verdadera transformación, no exenta de problemas, del modelo económico y del régimen político. Se trató de una verdadera transición en todos los órdenes de la vida pública que va más allá de la trunca transición procedimental a la democracia.

Durante 36 años se sucedieron presidentes que marcaban su distancia respecto a su predecesor. Mantenían intacto el modelo económico pero se apresuraban a desmarcarse de quien los había designado por medio del “dedazo”. El caso más emblemático es el de Ernesto Zedillo que incluso llevó a la cárcel al hermano del expresidente Carlos Salinas de Gortari; encerró a Raúl, el “hermano incómodo”. Esa era la mecánica del poder. Hacer como que se distanciaban, pero en el fondo terminaron abrazados.

Hoy, por primera vez en la historia política mexicana, la presidenta CSP no solo no trata de marcar distancias con su predecesor, sino que asume sin cortapisas el proyecto económico, social y político de AMLO. Hay una continuidad evidente en las políticas públicas, con algunos énfasis distintos (por ejemplo, en el tema del combate a la inseguridad) pero no existe un rompimiento en lo esencial con la transición impulsada a partir de 2018.

La confirmación la hizo este domingo 5 de octubre con motivo de su I Informe público: “La transformación avanza”, ante un Zócalo de la Ciudad de México a reventar. Dijo la presidenta: “(Es) la herencia de un hombre honrado y profundamente comprometido con su pueblo…Se han empeñado en separarnos, en que rompamos, su objetivo no es otro más que acabar con el movimiento de transformación. Que nos dividamos, pero eso no va a ocurrir porque compartimos valores: honestidad, justicia y amor al pueblo de México. Porque compartimos proyecto… AMLO fue, es y será siempre un ejemplo de honradez, de austeridad y de profundo amor al pueblo. Nunca se rindió, nunca se vendió a los poderosos, nunca se apartó de sus principios y escúchenlo bien, su presidenta tampoco lo hará”.

Por si había alguna duda, CSP hizo el reconocimiento público más claro y contundente de AMLO y su gobierno. Siguen otros cinco años de continuidad con cambio. El tiempo será fundamental para profundizar la transformación indispensable de un régimen que fue corrompido hasta sus cimientos y de un modelo económico que garantizó privilegios y enriquecimiento de unos cuantos.

  • *- El autor es presidente de El Colegio de la Frontera Norte.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí