10 ideas para limpiar Tijuana

Por fin, después de 9 meses de Gobierno, el Ayuntamiento presentó el proyecto “Tijuana Limpia” que pretende cambiarle el rostro a la ciudad.

Por ello, les propongo diez ideas para lograrlo:

Multar a los dueños de los terrenos baldíos que no los tengan cercados y limpios. El Ayuntamiento podría entrar a realizar lo conducente y cobrarlo vía el predial con un cargo adicional.

Eliminar el mobiliario urbano obsoleto y en mal estado. Es increíble que aún haya casetas de teléfono público y buzones de un servicio postal que ya no funciona o incluso paradas de autobús en pésimo estado. Hay mucho por retirar.

Sancionar a los promotores de eventos, inmobiliarias, tarotistas, abogados y otros que colocan publicidad en los postes de alumbrado público y de electricidad. No solo lo hacen sin permiso sino que tampoco los retiran cuando la actividad ya culminó. Está bien fácil, en el propio anuncio está la dirección y el teléfono para ir a cobrar la sanción.

Prohibir la distribución de volantes, sobres y “lonitas” en los negocios, casas, cercos y paradas de transporte público. Es un papelero que termina tirado por todos lados.

Eliminar estructuras de anuncios obsoletos. Ahí nos encontramos con anuncios luminosos antiguos e incluso de carteleras espectaculares que son un peligro para el transeúnte o el vehículo en la calle. Existen muchos anuncios en pésimo estado con lonas o letreros quemados y derruidos por el sol, lluvia o viento.

Enfatizar la supervisión de la limpieza diaria y eliminación de maleza que estamos obligados todos a realizar frente a nuestras propiedades. Una brigada por delegación haría mucho conminando al residente u ocupante de un local a que mantenga en buen estado su espacio. Si no lo hace ¡que se le cobren multas!

Hacer una gran campaña y estrategia para encarcelar a grafiteros que nos tiene pintarrajeados los edificios, puentes, monumentos y toda clase de estructuras urbanas. No le demos vueltas al asunto. Cada grafiti es una firma de alguien y con un trabajo policiaco de inteligencia deberíamos saber quién es. A la par, hay que borrar graffiti de espacios públicos y conminar a los privados a que también lo hagan.

Urge una regulación estricta del ambulantaje y su forma de afear la ciudad con carritos, lonas y tendederos de todo tipo. No solo ocupan la vía pública con un tamaño descomunal no permitido, sino que además no cuidan su presentación, especialmente puestos de comida preparada. Obliguenlos a contar con una carpa igual para todos, uniforme para sus empleados y un letrero similar.

Tenemos el gravísimo problema de la contaminación visual. Ya no hay espacio sin colocarle una cartelera, una valla a nivel calle, una pantalla led, una pared con anuncios. Basta. Es increíble lo estresante que resulta no tener una ciudad limpia visualmente hablando. ¡Hasta los carros y autos empresariales deberían eliminar sus anuncios! Nos urge transmitir paz. Entremos en un proceso gradual para eliminar permisos en funcionamiento para disminuir la cantidad de anuncios.

Cumplir con el programa presentado: barrer calles, jardinar las áreas públicas o mínimo eliminar la maleza que nos invade, pintar y lavar los puentes y estaciones de transporte público, levantar escombros de obras y en general, mejorar la presentación de la ciudad, primero por “donde ve la suegra” y después en cada rincón.

Tarea fácil no es, pero sí podemos limpiar Tijuana con voluntad y un poco de dinero público además de una gran colaboración de todos nosotros.

• * El autor es un opinólogo tijuanense enamorado de su ciudad.