El citatorio

El que debe tener listo su ejército de abogados es el ex gobernador Jaime Bonilla.

Valdez, quien ha sido citado por la Fiscalía General del Estado (FGE) en calidad de indiciado o acusado, para una diligencia de carácter penal.

La cita para el ex gobernador durante el periodo 2019-2021 fue entregada en uno de sus domicilios en la ciudad de Tijuana y es firmada por el agente del Ministerio Público Rogelio Robledo Martínez, titular de la Unidad de Investigación de Delitos Contra el Patrimonio, Sociedad, Estado y Justicia.

El ex mandatario está apercibido de que recibirá una multa o un arresto hasta por 36 horas, en caso de no acudir a la cita mañana en punto a las 14:00 horas a esa unidad especializada, ubicada en la vialidad del Río Nuevo, en Mexicali.

Con esta cita, Bonilla se une a sus ex subordinados, quienes están acusados por presuntas irregularidades en el caso de la construcción de una planta fotovoltaica en Mexicali.

En las indiscretas paredes de la FGE se escucha que Ma. Elena Andrade Ramírez y su equipo van con todo contra el ex mandatario del PT y ex Senador, quien se dice amigo personal del presidente Andrés Manuel López Obrador.

De hecho no habían podido ir en meses anteriores contra él porque contaba con el fuero constitucional que le otorgaba la Senaduría, pero como no logró reelegirse se quedó sin ese manto protector.

El largo brazo de la ley a través de la Fiscalía trata también de llevar a la cárcel por las presuntas irregularidades detectadas a otros ex funcionarios en la administración estatal de dos años, como Karen Postlethwaite, Salomón Faz, Rodolfo Castro, Adalberto González, Israel Clemente y Marco Milton, entre otros.

Así que habrá que ver si mañana se presenta el entonces ex gobernador morenista para rendir su declaración como indiciado o de plano ignora la cita, aunque para ellos se exponga a que pidan una orden de aprehensión en su contra.

Los 43

Todo parece indicar que el dinero y los acuerdos en los oscurito para esconder bajo la alfombra, esa que no se ha barrido de arriba para abajo ni a los lados, puede ser la llave para que los senadores de la mayoría oficialista de Morena y apéndices, logran obtener el ansiado voto que les daría mayoría calificada para aprobar la reforma judicial ordenada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

La única manera en la que la oposición puede frenar la reforma de marras, es que los 43 senadores del

PAN, PRI, MC y Manlio Fabio Beltrones Rivera, se presenten en la sesión y voten en contra, porque el oficialismo solo necesita un voto para hacer la mayoría calificada. Pero… desde ayer ha trascendido en medios de comunicación nacionales y en alguna que otra columna política, que el senador panista Miguel Ángel Yunes Márquez podría ser el “Judas” de la oposición, quien votaría a favor de la reforma judicial para dar la mayoría calificada al oficialismo, a cambio de ser favorecido de diferentes maneras, entre ellas la cancelación de órdenes de aprehensión y de carpetas de investigación en su contra y de su padre, el ex gobernador y senador suplente Miguel Ángel Yunes Linares.

Incluso, se daba ayer como un hecho que Yunes Márquez se había pasado ya a la coalición oficialista “Juntos Haremos Historia”, aunque nada de eso fue confirmado.

En fin, la reforma judicial será votada en el Senado en cualquier momento, quizá mañana, donde la única forma de parar esa ocurrencia mañanera es con el voto en bloque de los 43 senadores opositores, porque con un solo “Judas”, ya sea por votación, abstención o ausencia, acabará con el Poder Judicial de la Federación, con la carrera judicial de cientos de Actuarios, Secretarios de Acuerdos, Jueces de Distrito, Magistrados de Circuito y Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Por el momento, la moneda está en el aire y todos, sobre todo los trabajadores en paro del Poder Judicial de la Federación, sostienen la respiración para ver si cae de lado de mantener la independencia de ese Poder de la Unión, o si cae del lado de la sumisión al Ejecutivo.