Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas /

La clase media en las elecciones

“La democracia es una forma superior de gobierno, porque se basa en el respeto del hombre como ser racional.” John Fitzgerald Kennedy

Ignacio  Calderón Tena

Se trata de un grupo social muy especial, que en países desarrollados, ha llevado la batuta en la mayoría de los cambios democráticos.

La clase media se puede definir ya sea por su ingreso, el gasto, la capacidad de consumo, la escolaridad o el estilo de vida. Tanto para la OCDE como para el Banco Mundial, su definición depende más del ingreso disponible. En México, según el INEGI, alrededor del 40% de los mexicanos seríamos clase media.

La clase media es sin duda, la responsable de detonar muchos de los movimientos sociales de gran envergadura, no solo en Europa, sino también en nuestro país.

Así, la clase media fue la que inició en México el movimiento de independencia en 1810 o la que se inconformó con Porfirio Díaz cuando no cumplió con su promesa de permitir elecciones libres y retirarse de la política un siglo después.

Esa clase media es la que se levantó en armas en contra del gobierno de Calles en 1926 al prohibirse la libertad de cultos y, en cierta medida, ha sido la que ha tomado la iniciativa en los movimientos democratizadores de 1989 en Baja California o en el 2000 con el cambio de régimen.

Sin embargo, esa clase media se ha visto afectada durante el actual sexenio, desde el momento en que el presidente López Obrador ha sido consistente en criticarla, argumentando que para ser feliz, con un par de zapatos es suficiente, denostando a aquellos que aspiran a un mejor futuro económico para sus familias.

Según datos del CONEVAL, se dice que en la clase media de México, la componen 36 millones de personas que, si bien no son pobres, es población vulnerable por carencias sociales, por lo que se puede considerar que durante el actual sexenio, las condiciones económicas no han favorecido su crecimiento, más bien su disminución.

A nivel mundial, la OCDE considera que el 61% de los habitantes de sus países miembros pertenecen a ese sector, cifra muy superior a la registrada en México. Sin embargo, cuando esa población ha sido suficientemente motivada, han salido a las calles y han demostrado con creces su fuerza y prueba de ello lo atestiguan Ruffo en nuestra Entidad y Fox en el espectro nacional.

Es claro que en las pasadas elecciones intermedias de 2021, este sector mostró su músculo, arrebatándole importantes posiciones al partido en el poder, tanto en la Ciudad de México, como en la Cámara de Diputados.

Según Oráculus, aproximadamente el 28% del votante mexicano se siente agraviado por los ataques del presidente que los ha llamado “Fifís” y otros peores calificativos, y ahí está la apuesta de los partidos de oposición a lograr que salgan a expresar un voto de castigo, como ocurrió hace 3 años en que, por ejemplo, en la alcaldía Benito Juárez salió el 63.74% de la lista nominal a sufragar en favor del PAN o en la Miguel Hidalgo en donde se registró una participación del 60.79%.

Por lo que nada está dicho para este 2 de junio en el que la clase media y en especial sus jóvenes, podrían lograr importantes cambios, solo si en verdad logran despertar de su letargo y cambian el paseo dominical por Coronado o Fashion Valley y acuden a las urnas a elegir lo que será su futuro para los próximos 6 años.

*- El autor es asesor empresarial en cabildeo.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí