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Vulnerables

La vulnerabilidad del país ha quedado expuesta una vez más. El reciente hackeo en contra de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) deja al descubierto lo débil e ineficiente del sistema de seguridad nacional mexicano.

La vulnerabilidad del país ha quedado expuesta una vez más. El reciente hackeo en contra de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) deja al descubierto lo débil e ineficiente del sistema de seguridad nacional mexicano.

6 terabytes de información, traducidos en cerca de 4 millones 144 mil documentos, se encuentran en manos del grupo de hackers llamado “Guacamaya” mientras el presidente de México, minimiza una vez más los errores de su gobierno.

Información confidencial de inteligencia, fichas detalladas de delincuentes, reportes específicos de casos vinculados al ejército mexicano, institución encargada del control de la seguridad pública, aduanas, migración, inteligencia y entre otras. Además, obras de infraestructura de “mayor relevancia” para el país, se encuentran al descubierto.

Se demuestra así que la seguridad de las familias mexicanas no es prioridad para el titular del ejecutivo, ni siquiera su salud y mucho menos la expresa renuncia que ha exigido “Guacamaya” hacks.

¿Qué podemos esperar que suceda ahora con AMLO? En lo que se refiere a su salud, expuesta también, mintió.

La salud de Andrés Manuel López Obrador, quedó expuesta, mostrando así a un presidente enfermo, cuyo bienestar físico pende de un hilo.

Y a diferencia de lo que el propio AMLO cree, su estado físico, sí es de preocupación para sus gobernados por las repercusiones políticas y económicas que puedan generarse.

¿Cuántas mentiras le ha dicho ya al pueblo mexicano?, ¿Cuántas más nos faltan por saber?, ¿Cambiarán las prioridades de la 4T?

Este hackeo más que la filtración de millones de documentos confidenciales, confirma que la estrategia “abrazos no balazos” continúa más firme que nunca y que minimizar sus errores es mejor que aceptarlos.

Las consecuencias del hackeo todavía están por verse.

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