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Discernir las tentaciones

El 7 de octubre de 1571, una flota cristiana convocada por el papa San Pío V derrotó en la Batalla de Lepanto al imperio otomano musulmán, evitando que destruyeran la civilización cristiana en Europa

El papa Francisco aconsejó dedicar un tiempo a la oración, al diálogo entre los cónyuges y con sus hijos, y a la vida comunitaria en la Iglesia

En la reciente audiencia general, el papa Francisco nos invita a discernir teniendo presente la Palabra de Dios

El gesto de arrodillarse, dice el papa Francisco en su carta sobre Liturgia, debe hacerse con plena conciencia de su significado simbólico.

Comenta el papa Francisco que entre los gestos rituales que pertenecen a toda la asamblea, el silencio ocupa un lugar de absoluta importancia.

En toda celebración litúrgica han de tener presente, no sólo en el celebrante, sino todos los que participan, que es una acción sagrada.

Una cuestión decisiva, señala el papa Francisco, es la educación para adquirir la actitud interior, que nos permita comprender los símbolos litúrgicos.

En la Liturgia, señala el papa Francisco, se utilizan muchos símbolos que representan realidades profundas y que es necesario aprenderlos y comprenderlos.

La creación, comenta el Papa, toda ella, es una manifestación del amor de Dios.

Si bien, Dios trasciende toda la realidad sensible, sin embargo, siendo creador de esa realidad, ha querido hacerse cercano y valerse de sus criaturas para tener el encuentro con nosotros.

La identificación con Cristo la lleva a cabo el Espíritu Santo en nuestra alma.

En una celebración litúrgica importa comprender, por ejemplo, a quién nos estamos dirigiendo.

Si el encuentro con alguien famoso nos aporta una experiencia emocionante, el encuentro con Dios no sólo proporciona la más valiosa vivencia, sino que también nos hace más valiosos a nosotros mismos.

Un reto actual es recuperar la capacidad de vivir plenamente la acción litúrgica.