Captura clandestina reduce expectativas de los camaroneros

Guaymas.- Por la captura clandestina de camarón que realizan pescadores furtivos en el Sur de Sonora, la falta de apoyos, la posible apertura anticipada en su veda y las restricciones que les impondrán por la pandemia de coronavirus, los productores no tienen buenas expectativas en la temporada 2020-2021.

Desde hace una semana, los pescadores furtivos de Empalme, El Tóbari, Yavaros y Agiabampo, principalmente, comercializan de manera indiscriminada el “oro rosado” que es pescado en las bahías y altamar de estas zonas.

También están las esposas de los “atarrayeros” que a diario ofrecen sin ningún pudor a través de redes sociales, la venta de camarón café, de una talla inferior a la 21-25, la cual es considerada como coctelera.

Sonora

Regidor del Ayuntamiento de Guaymas resulta herido

Aunado a esto, este ciclo camaronero podría adelantarse entre el 15 y 20 de agosto para embarcaciones menores, a pesar de que el Centro Regional de Investigación Pesquera aún no ha concluido los muestreos en las costas del Estados.

Desde que inició el año, el subsidio de gasolina ribereña y diésel marino fue eliminado de los apoyos federales en los productores, lo que ha encarecido la actividad pesquera y con ello la reducción en las ganancias.

SE LO ESTÁN ROBANDO: PRESICHE

En las costas del Sur de Sonora se está comercializando el camarón que capturan los pescadores furtivos, y eso provocará que nos “truene” la temporada 2020-2021 que está próxima a abrirse en las bahías de Sonora, opinó el líder de la Federación Agustina Tapia.

José de Jesús Presiche Olachea denunció que la pesca clandestina del crustáceo en el Sur del Estado es un tema de todos los días, sin que ninguna autoridad impida o detenga esta actividad ilícita.

“Como es posible que la autoridad en su momento no haya dado revisión a los inventarios presentados en las oficinas de pesca y así atestiguar la veracidad del mismo, aquí hay mucha complicidad de los gobiernos en todo eso”, consideró.

Sonora

Hombres que dispararon a 4 elementos AMIC son vinculados a proceso

Las familias de pescadores, indicó, viven en la pobreza y los gobiernos proponen resolver este tema con “mejoralitos”, mediante la entrega de apoyos que no solucionan sus problemas.

La cosa se ve difícil en nuestro sector, porque estamos viendo que todos los días salen pangas a pescar el camarón y en las bahías es lo mismo, con los ‘atarrayeros’, y ya no contamos con apoyo de gasolina ni diésel, esto va a encarecer la actividad, sobre todo para los barcos que necesitan hasta 30 mil litros para realizar un viaje de un mes”, subrayó.

Desde este año, agregó, el Gobierno federal también eliminó apoyos para la compra de motores, redes, reparación de máquinas y la compra de otros equipos para embarcaciones menores y mayores, y aunque el Estado los ha apoyado, la ayuda es menor.

“En el programa de Inspección y Vigilancia tuvimos cero pesos, por lo que el Estado aportó recursos para llevar a cabo el cuidado y protección del recurso, sin embargo no ha sido suficiente”, puntualizó.

NO TIENE PRECIO: COTA

El “oro rosado” podría enfrentar uno de los ciclos más desastrosos de la historia a consecuencia del coronavirus, porque desconocen las restricciones sanitarias que les impondrá el mercado estadounidense al llevar a cabo las exportaciones y se bajará más su precio, apuntó Gilberto Cota Valdés.

El dirigente de la Federación de Cooperativas en Guaymas y Empalme, informó que la temporada camaronera que iniciará en unas semanas podría resultar igual de desastrosa que las pesquerías de escama, jaiba y otros productos de temporada.

Hoy en día, dijo, el valor del camarón bajó en un 30% con relación al del ciclo anterior, que se consideró como bajo al aumentar el precio del dólar.

“Son más de 5 mil fuentes de empleos que dependen de forma directa de la pesca de camarón en la región Guaymas-Empalme, las autoridades deben tener en cuenta que nuestra actividad es importante como las otras”, señaló.

Hay ribereños que no han terminado de colocar el producto que pescaron el año pasado, al reducirse el número de clientes en el interior del País.

“En nuestro caso, todavía tenemos 130 marquetas de camarón, de la temporada pasada, de la talla 16-20 y ahora las estamos ofreciendo a precios muy debajo de lo normal porque no hay clientes”, subrayó.

Si la temporada se adelanta como pretenden algunos de sus compañeros, consideró, podría afectarlos aún más porque el producto todavía no alcanza la talla comercial requerida que mayormente es la 16-20 y los Under 15.

A DETALLE