Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Sonora / Mariposario

Buscan Pueblos Yaquis preservar tradiciones al instalar mariposarios

Dan vida a la mariposa Cuatro Espejos y obtienen capullos para la elaboración de tenabaris para sus danzantes

CIUDAD OBREGÓN.- Para preservar su cultura y tradiciones, los ocho Pueblos Yaquis ahora cuentan con sus propios mariposarios, ubicados a un costado de los centros culturales de cada comunidad.
Estos espacios les servirán, además de para proteger la mariposa Cuatro Espejos, también para continuar elaborando tenabaris de forma natural.

Los tenabaris son una parte importante del atuendo, tanto de la Danza del Venado como de Pascola, y se realizan con los capullos de las mariposas y piedras de río, y ante la falta de estos en la vida natural los estaban elaborando con otros materiales, como aluminio.

En el caso de los danzantes de Venado utilizan alrededor de 200 capullos, 100 para cada tobillera, y en el de Pascola 800, 400 por sarta en cada pierna.

María Trinidad Ruiz Ruiz, directora del Centro de Culturas Populares e Indígenas en Cajeme, explicó que cada uno de los pueblos contará con un mariposario, el cual se encuentra a un costado de los Centros de Cultura Yaqui de cada comunidad.

Puntualizó que ya está terminado completamente el del pueblo de Tórim y ha logrado dar vida a más de 20 mariposas y producir alrededor de 100 capullos.

En Loma de Guamúchil, Belém, Huiribis, Rahum y Pótam se está trabajando en el trasplantado de sangregado, que es la planta hospedera de la mariposa y las adecuaciones generales del espacio, compartió.

El objetivo de estos mariposarios es tener un espacio adecuado para la conservación de la mariposa y su reproducción y que estos a la vez generen los capullos, para poder ser utilizados por la comunidad para hacer tenabaris”, indicó.

Comentó que no quieren que se replique lo que está pasando en la región del Mayo y en algunas partes de la comunidad Yaqui, donde al menos uno de cada nueve danzantes por la falta de capullos utiliza adecuaciones de otros materiales.

“Algunos danzantes por la escasez hacen sus tenabaris de aluminio, porque no cuentan con el dinero para comprar capullos naturales de otras partes de la república, además que son caros y se necesitan muchos”, manifestó.

Participan todos

Ruiz Ruiz detalló que aun cuando el mariposario beneficiará principalmente a los danzantes, muchos miembros de cada comunidad participan gustosos en las actividades para levantar estos espacios y lograr que la mariposa se reproduzca y dé vida.

En los centros culturales se les enseña, a todo el que lo desee, resaltó, el proceso de vida y reproducción del insecto, para que pueda apoyar en las labores dentro del mariposario.
“Cada mariposario está a cargo de cada titular de los centros, quienes juntan su equipo con miembros de la comunidad para darle vida al espacio”, dijo.

Buena expectativa

José Antonio Mejía Muñoz, encargado del mariposario en Tórim, aseveró que hay buenas esperanzas, ya que cada temporada el lugar cobra más vida y muestra grandes avances y espera así sea en cada uno de los mariposarios.

El Mariposario de Tórim despertó poco a poco y aunque las condiciones del clima no lo favorecieron, han nacido más de 20 mariposas y hay poco más de 80 capullos.

“Actualmente tenemos 80 capullos, todos con alta probabilidad de nacer como mariposas, de cada 20 capullos aproximadamente nacen de 10 a 15 hembras y unos pocos machos”, mencionó.

Las mariposas que nacen las meten en una jaulita, dijo, y las mueven a lo fresco dentro del centro de cultura, porque el calor está muy fuerte ahorita y las mataría rápido.

Para que los otros mariposarios avancen les donarán orugas, al igual que a ellos se los hizo el mariposario de Cócorit, concluyó.

Las mariposas Cuatro Espejos y los capullos de estas ayudan a preservar las tradiciones yaquis.

En esta nota