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El Imparcial / Hermosillo / Crisis de agua en Sonora

Piden asegurar agua a Hermosillo, pero sin tomar en cuenta desaladora

Hermosillo ¿Cómo Vamos? afirma que a largo plazo, implica altos costos

HERMOSILLO, Sonora.- Integrantes de la Mesa de Agua de la organización Hermosillo ¿Cómo Vamos? hicieron un llamado a las autoridades para asegurar el abasto de agua en Hermosillo y resaltaron que una desalinizadora no es la mejor opción, ya que es a largo plazo, implica altos costos y afectaría al medio ambiente.

Nicolás Pineda Pablos, coordinador de la Mesa Temática e investigador del Colegio de Sonora, resaltó que hay una gran preocupación por la sequía que desde hace cinco años se está viviendo en Sonora y el abasto de agua depende de las lluvias que pudieran presentarse en el próximo verano, principalmente en Hermosillo.

El problema, puede que no sea la sequía, el problema es la mala administración del agua y la sequía abre una ventana de oportunidad para poner un poco de orden en nuestra ciudad en la cuestión del agua”, dijo.

Explicó que de acuerdo a los datos que proporcionó el Monitor Nacional de Sequías, la región centro de Sonora estuvo en sequía extrema en 2018 y posteriormente en 2020 y 2021, y el panorama para este año no es distinto, y se sabe que la capital del Estado cuenta con desabasto de agua.

Indicó que tanto los acuíferos como las presas en general cuentan con la menor cantidad de agua de la que deberían de tener y según el reporte que el organismo operador de agua, en promedio, cada hermosillense consume 411 litros al día, lo que significa que la ciudad tiene alto consumo, además de las pérdidas del agua por la deficiente infraestructura.

Karina López Ivich, experta en ingeniería ambiental, destacó que esos 411 litros por día equivalen al consumo de un millón 700 mil habitantes y Hermosillo cuenta con poco más de 900 mil, y hay posibilidades de bajar ese consumo a 220 litros por día.

Resaltó que la inversión que el Gobierno federal pretende hacer de aproximadamente 500 millones de pesos para solucionar la problemática de la micromedición y eficientar el control del agua, es solo una parte de la solución, ya que hay otras prioridades.

“Está la red de abastecimiento, que se tiene que actualizar. Otro punto importante es la planta de tratamiento de aguas residuales, se pueden tratar 2 mil 500 litros por segundo. Ese es un número muy importante, que no deberíamos de estar utilizando agua limpia para ciertos sectores y ciertos usos, que tiene la calidad adecuada para ciertos usos.

“El tercer punto”, añadió, “es el agua de lluvia. Tenemos cálculos estimados para la ciudad de dónde están esos puntos que nos permitirían en la ciudad empezar a recargar agua y también los volúmenes de agua que se pueden recuperar con el historial de lluvia que tenemos en la ciudad”.

Otra de las urgencias es que se eche andar el “Ramal Norte”, para mejor distribución en el Norte de la ciudad, el cual actualmente lleva alrededor de un 20% en su construcción.

DESALINIZADORA NO ES OPCIÓN

Luego de enlistar las prioridades que se tienen que hacer primero en Hermosillo para solucionar el desabasto de agua, Karina López Ivich subrayó que este sexenio no es el adecuado para construir una desalinizadora o sustraer el agua desde la desalinizadora de Empalme, ya que no es redituable en costos y afectaría al medio ambiente.

Explicó que en ocasiones, el Municipio no cuenta con el recurso para pagar el servicio de agua que se sustrae con el Acueducto Independencia y menos tendrá para sustraer el agua desde Guaymas-Empalme.

“Si en Guaymas, el agua de la desalinizadora cuesta entre 17 y 18 pesos el metro cúbico y estamos en que nos la vamos a traer hasta Hermosillo, súmale los costos que tiene eso, claro que anda entre los 20 y 25 pesos, y hay estudios que lo avalan.

“Para mi punto de vista, la desalinizadora no es para este sexenio, hay muchas otras opciones que se deben de atender con una inversión fuerte que, además, nos dejaría a los ciudadanos en Hermosillo un agua de un precio adecuado, no un agua cara”, destacó.

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