Germán Octavio y su mamá hornean postres con causa

Deliciosos pasteles y coloridas galletas son las que prepara Germán Octavio Ángulo Quiroz, de 18 años de edad, un joven con autismo que se ha convertido en todo un emprendedor con la ayuda de su mamá, al iniciar el negocio de “Postres con causa”.

“A él le encanta la cocina, se pone a cernir la harina, ayuda a estirar la masa y es el encargado de pintar las galletas concientizadoras de autismo que estamos ofreciendo”, explicó Karla Fernanda Quiroz.

El proyecto de ofrecer postres inició en diciembre cuando Karla Fernanda se quedó sin trabajo y en busca de una terapia ocupacional para Germán empezaron a hornear bollitos, galletas y pasteles.

Germán tiene su rutina bien definida, le gusta tener todo en orden y siempre de la misma forma antes de empezar a pintar las galletas, es risueño y le fascina escuchar música en una pequeña bocina mientras trabaja.

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A pesar de que su comunicación verbal es poca, se comunica gracias a una tableta y a través de gestos.

Es una terapia para él y es la entrada económica que tenemos ahorita para costear los gastos, él sabe que es un trabajo que hay que hacerlo, pero siempre respeto sus tiempos, además de esta actividad le gusta nadar y jugar beisbol”, expresó orgullosa.

UN SUEÑO

El sueño de Karla es que su negocio crezca y poder emplear a jóvenes con autismo, para que ellos sean independientes y puedan tener un ingreso económico.

Por lo pronto tiene agenda abierta para el Día del Niño, fecha para la que ofrece deliciosos pasteles y también galletas acuarela, con todo lo necesario para que los reyes del hogar pinten su galleta.

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