"Arigato goza-y-más": A través del país del Sol naciente

, así inicia Fernanda Ballesteros Fernández un viaje de 86 páginas sobre su travesía en Japón, obra ganadora del Concurso de Libro Sonorense en su categoría de Crónica.

Fernanda estudió periodismo en la Universidad de Guadalajara y continúo sus estudios de Literatura e Historia en la Universidad de París Pantheón-Sorbonne; luego decidió viajar a Japón, un destino que ansiaba conocer.

Lo que más le impresionó, relata, fue “la soledad de las multitudes”: La gran cantidad de gente que la rodeaba observaba un respeto frío que, considera, contrasta con la calidez de la cultura mexicana.

, manifiesta.

Para continuar conociendo más de su cultura, confiesa que gustosa volvería a visitar el país del Sol naciente, donde la belleza de la imperfección, de lo invisible y del movimiento fueron parte de su aprendizaje.

“Tuve que leer muchos libros para seguir aprendiendo sobre sus conceptos. Aparte de mi experiencia allá, los libros fueron como echarle aceite al motor para que continuara”, añade.

El contraste con el idioma y la cultura fue para Fernanda uno de los principales retos, pero esto fue otro motivo para experimentar con el diseño del interior.

La necesidad de plasmar su experiencia de un mes en el país nipón en un tiempo restringido -sólo quedaban 22 días para el cierre de la convocatoria cuando se enteró- fue por lo decidió participar en el Concurso del Libro Sonorense 2018 en la categoría de Crónica.

“Me dediqué solamente a eso. Me decidí porque esa experiencia quería salir de alguna manera de mí, entonces me puse de lleno a hacerlo por 22 días.

, explica.

Su crónica “Arigato goza-y-más” -un juego de palabras con la pronunciación de “Muchas gracias” (ah-ree-gah-toh goh-zah-ee-mas) en japonés-, será publicada por el Instituto Sonorense de Cultura, como parte de su premio. Se trata de la primer publicación de la joven de 27 años.

En el dictamen, los jurados Iris García y Rogelio Villarreal explican por qué seleccionaron la obra Arigato, de Ballesteros Fernández, que fue presentada con el seudónimo de Nikita Niponga: “Un ejercicio interesante de escritura, con recursos tipográficos, formales, y una redacción clara, limpia e ingeniosa. Una propuesta experimental con un interesante diálogo con la literatura”.

La escritora puntualiza que espera continuar concursando en un futuro en los eventos y en los diversos géneros literarios, para expresar sus vivencias a los lectores.