Lo que dicen de ti sí importa

Todo va sobre ruedas… hasta que un cliente insatisfecho deja un comentario negativo en redes sociales; de pronto, te das cuenta de lo frágil que puede ser todo. ¿Te suena familiar? En el mundo actual, la reputación es tan valiosa como el producto que ofreces.

La reputación empresarial no es un lujo, es una necesidad. ¿Por qué? Porque vivimos en un mundo hiperconectado, donde una simple búsqueda en internet puede definir si alguien decide comprar o no tus productos.

Y aunque el lema “No me importa lo que digan de mí” puede funcionar para una estrella de rock, en el mundo empresarial ése es un camino seguro hacia el fracaso.

Hermosillo

Sonora, nueva sede del Capítulo Noroeste de AmCham

Desde la perspectiva de la imagen pública, la reputación va más allá de lo que haces; es lo que los demás perciben sobre lo que haces.

Ya no basta con tener un buen producto o servicio: ahora, los consumidores buscan empresas que compartan sus valores, que sean transparentes y auténticas; el público no sólo quiere calidad, quiere confianza.

Cuida tu imagen

Entonces, ¿cómo cuidar esa reputación? La clave está en la coherencia: cada mensaje, cada acción y cada interacción deben estar alineados con los valores que tu empresa desea proyectar.

Si una marca se presenta como ecológica, pero luego se descubre que sus productos están fabricados con materiales dañinos para el medio ambiente, la credibilidad se desploma.

Lo mismo sucede cuando una empresa que promueve la inclusión y diversidad se enfrenta a denuncias internas por discriminación; la desconexión entre lo que se dice y lo que se hace es una receta segura para perder la confianza del público.

Piensa en la reputación como una planta que requiere cuidado constante. No se trata sólo de evitar las crisis, sino de construir una imagen positiva, auténtica y coherente que resista los altibajos.

En caso de una crisis, contar con el apoyo de expertos en imagen pública puede marcar la diferencia para salir fortalecido. Al final del día, lo que los demás piensan de tu empresa puede ser lo que la lleve al éxito o al olvido. Y tú, ¿cómo estás cuidando la reputación de tu negocio?