Construye hace 30 años réplica a escala de Templo Histórico de Caborca para pagar manda

PUERTO PEÑASCO.- Una réplica idéntica, a escala, de 2.5 metros cuadrados, sin contar las torres, del templo histórico de Caborca, construyó con sus propias manos, en Puerto Peñasco, Roberto Montijo Romo (ahora de 93 años de edad) como manda para que su hija sanara de un accidente grave, hace más de 30 años.

Sobre cómo nació esta idea, Maritza Montijo, hija de Roberto, relató que su papá –aún se conserva lúcido y de buen humor-, comenzó a construir la réplica a instancias de su esposa, ya fallecida, cuando le pidió que hiciera sólo un altar, para rezar a la Virgen por la salud de ella (Maritza) ya que había sufrido un accidente serio y estaba paralizada.

Entonces, como Roberto nació en Pueblo Viejo (Caborca) frente al templo de Nuestra Señora de la Purísima Concepción, de repente le vino a la mente esa imagen y se le ocurrió no solamente hacer un altar sino replicarla a escala, con todos sus detalles interiores y las torres, “nomás le faltan los hoyos de los balazos de la Gesta Heroica y los jardines”, dijo.

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Maritza revela que siente muy hermoso que su propio padre haya construido esa iglesia, porque él dice que no es capilla, a la cual entra de pie a rezar todos los días después de concluirla por el año de 1992 después de que ella (en 1990) sufriera un accidente grave. Ahora está bien.

Fue mi mamá, descanse en paz, que era muy devota de la Virgen de Guadalupe, quien le dijo que le hiciera un nichito para colocar su imagen y aquí está su iglesia. Él siempre habla de su Caborca a pesar de tener alrededor de 70 años viviendo en Peñasco.

“Mi papá llegó aquí como ayudante de constructor de barcos, allá por los 40′s. Él y su papá, mi abuelo, que también se llamaba Roberto, fundaron el primer astillero en Peñasco, Astilleros Montijo, y gracias a esos conocimientos adquiridos al hacer barcos, es que hizo esta réplica”, confió.

Maritza complementa que, aunque la réplica no está a la vista (por estar en el patio intermedio de la vivienda y el restaurante), familiares y amigos, o personas que van al consumir, la miran atrás por la ventana, les da curiosidad y le piden permiso para entrar, porque se ha corrido la voz.

Ahondó que cualquier persona que acuda a Puerto Peñasco puede ir a visitar la réplica, en la colonia Centro, por las calles Álvaro Obregón y Francisco I. Madero, atrás del patio trasero del restaurante Quinto Sol, que es el patio de la casa de Roberto, antes de que construyeran el local.