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El Imparcial / Hermosillo / Unison

Estudiantes de Ingeniería en Metalurgia de la Unison asisten a clases con su bebé

Ambos desean poder graduarse en tiempo y forma de la carrera y con un excelente promedio, para poder brindarle un buen futuro a su hijo y enseñarle, sobre todo, que juntos van a poder hacer cualquier cosa que propongan.

Estudiantes de Ingeniería en Metalurgia de la Unison asisten a clases con su bebé

Daniel Valenzuela y Karla Esquer tuvieron su primer hijo el 29 de marzo del año pasado, mientras estudiaban séptimo semestre de la Ingeniería en Metalurgia; sin embargo, la paternidad no fue un impedimento para continuar sus sueños, pues el pequeño Isaac Elías ha tomado cada una de sus clases con ellos, acompañándolos desde su portabebe o cangurera.

Nosotros somos de Álamos, los dos, entonces no tenemos familia aquí y por eso nos lo traemos a clases”, explicó la joven mamá, “y la verdad es que han sido muy buenos con nosotros porque nos han apoyado, nuestros compañeros, los maestros, siempre nos dejan tenerlo en el salón o cuando tenemos examen ellos lo cargan y nos ayudan”, contó agradecida. “Nuestros papás nos apoyaron mucho también, nos dijeron que podíamos seguir estudiando, nos apoyan económicamente, y por eso entre los dos siempre intentamos dar lo mejor todos los días, él lo carga una hora, yo otra y así, prácticamente nuestro bebe ha hecho la carrera con nosotros, se va a graduar también”, expresó sonriente.

Daniel Valenzuela y Karla Esquer tuvieron su primer hijo el 29 de marzo del año pasado, mientras estudiaban séptimo semestre de la Ingeniería en Metalurgia

El menor, quien está a punto de cumplir su primer año de edad, suele ser tranquilo en clase, dormir en los brazos de sus papás, o jugar con los “tíos y tías adoptivas” que tiene en la universidad.

El bebé es parte de la clase

Todos los compañeros dijeron sentirse muy emocionados de ver al niño todos los días y ser parte de su crecimiento, pues lo conocieron cuando tenía 4 meses de edad y ya están a punto de celebrarle su primer año.

Cuando lo tuve, en marzo pasado, los profes me dejaron hacer los exámenes en línea, los trabajos y ya me vine cuando él tuvo cuatro meses, en agosto pasado. Al principio sí tenía miedo, pero todo se ha ido acomodando, no siento que haya sido tan difícil, nos tocó la fortuna que se duerme toda la noche, que es muy tranquilo en clase y que mis amigos lo han recibido muy bien, lo quieren mucho”, dijo contenta Karla.

Todos los compañeros dijeron sentirse muy emocionados de ver al niño todos los días y ser parte de su crecimiento

El papá del niño, Daniel Valenzuela, también compartió sentirse muy agradecido con sus padres por haberlos apoyado y permitirles seguir estudiando mientras cuidan a su hijo.

Me siento orgulloso, de mí, de mi familia, porque no todos lo logran hacer lo que nosotros, ni todos tienen el sustento de sus papás, que es lo que más nos ha ayudado y les estoy muy agradecido”, mencionó.

Ambos desean poder graduarse en tiempo y forma de la carrera y con un excelente promedio, para poder brindarle un buen futuro a su hijo y enseñarle, sobre todo, que juntos van a poder hacer cualquier cosa que propongan.

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