Un tesoro musical en Ciudad Obregón

CIUDAD OBREGÓN.- Al fondo de la segunda planta de la Biblioteca Pública Municipal “Jesús Corral Ruiz”, más allá del murmullo de teclas en el área de cómputo, se resguarda un rincón mágico que pocos conocen: La fonoteca. Este espacio, cálido y lleno de historia, atesora más de 9 mil discos de vinilo, una colección que abarca géneros e idiomas diversos y que se ha preservado durante generaciones. Cada vinilo es una cápsula del tiempo, una melodía suspendida que revive épocas, emociones y recuerdos.

Por décadas, esta joya musical ha estado al servicio de la comunidad, no sólo para consulta, sino también con los discos a préstamo, permitiendo llevar la música a los hogares de los cajemenses.

El origen de esta fonoteca data de 1992, cuando una radiodifusora local donó una parte importante de su colección a la biblioteca. Ese fue el punto de partida para reunir cientos de discos de vinilo que, con el paso de los años, se consolidaron como uno de los más grandes acervos musicales en espacios públicos en Cajeme.

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Sin embargo, fue hasta 2014 que el acervo recibió una verdadera transformación. Se le habilitó un espacio especial dentro de la biblioteca, equipado con mobiliario adecuado y sistemas de audio que permitían a los visitantes escuchar los acetatos en el lugar. Además, se mantuvo la modalidad de préstamo, facilitando que la música llegara a diversos hogares de Cajeme.

ESPACIO ÚNICO

Ana María Ruiz Figueroa, encargada de la fonoteca de la Biblioteca Pública Municipal, destacó que este espacio es uno de los servicios más especiales que ofrece el recinto, ya que no solo alberga vinilos, sino también CDs y casetes, lo que lo convierte en un sitio único en su tipo en el Sur de Sonora.

Detalló que, en promedio, la fonoteca recibe alrededor de 60 visitantes al mes, entre ellos personas de todas las edades. Sin embargo, han observado una mayor participación de jóvenes de nivel preparatoria y universidad, quienes se interesan por explorar la música en formatos físicos y conocer la historia detrás de cada pieza.

Tenemos dos campos de acción, la fonoteca tiene una cuenta de tiktok y aproximadamente tiene vistas de mil usuarios por mes y en la cuestión física son 60 usuarios por mes, no es tanto, pero va creciendo, sobretodo entre la juventud. No sabemos si porque es novedad entre ellos o porque se esta volviendo a poner de moda”, indicó.

Las personas que visitan el sitio recorren todo el lugar para conocerlos, manifestó, enfocan su gusto musical en los géneros de rock en español, en inglés, y pop.

Ana María Ruiz agregó que mantener la fonoteca en orden es un trabajo muy arduo y que actualmente, con el apoyo de los jóvenes que realizan su servicio social en el lugar, están actualizando en una base de datos la información de cada acetato, para conocer el artista, género y año de producción.

La invitación es para toda la comunidad, de todas las edades, porque hay discos para todos los gustos: Infantiles, de poesía, bandas sonoras... muchas opciones para cualquier preferencia. Todos pueden hacer uso de este material”, destacó.

BUSCAN IMPULSAR EL SITIO

Fabiola Hinojosa, música y DJ, compartió que a través de la realización de eventos especiales en la fonoteca buscan acercar este espacio a más personas y fomentar su uso entre la comunidad.

Como parte de las nuevas generaciones, señaló que sienten la responsabilidad de “volver a dar vida” a la fonoteca y otros espacios culturales, transformándolos en lugares divertidos, accesibles y cotidianos.

Vivimos en una ciudad que, como muchas otras, atraviesa momentos difíciles: Violencia normalizada, exceso de estímulos, una sensación constante de prisa y desconexión. En medio de todo esto, la cultura a veces queda relegada, silenciada y olvidada. Por eso, recordamos que aún hay belleza, memoria y posibilidad en lo cotidiano, y que dignificando los espacios públicos y apropiándonos de ellos con respeto, podemos darles vida nuevamente”, reflexionó.

En la búsqueda de formas creativas para utilizar este espacio, Fabiola ofreció una presentación musical en la fonoteca titulada “Vinoloteca”, donde los asistentes disfrutaron de un “viaje” sonoro por distintas épocas, estilos y géneros, escuchando canciones de artistas como Air Supply, La Brissa, Mecano, The Beatles, Eagles, entre otros.

ES BUENO QUE EXISTA

Oscar Castro, cajemense de68 años de edad, expresó que la fonoteca es un espacio importante y valioso, ya que la música tiene múltiples beneficios para las personas.

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La música, por naturaleza,ha acompañado a las personas durante generaciones, dijo, poder viajar a través del tiempo mediante distintos géneros musicales y hacerlo en un solo sitio, es algo maravilloso.

Necesitamos lugares como este para hacer una retrospectiva personal, para descubrir qué nos gusta y qué podemos rescatar de todo lo bueno que hay en la música. Es un lugar excelente, porque aquí está todo. Es una manera fácil y accesible de adentrarse a un mundo musical muy enriquecedor”, destacó.

Por su parte, Luis Rodrigo Magallán, también originario de Cajeme y músico de profesión, comentó que hasta hace pocas semanas desconocía por completo la existencia de la fonoteca, y descubrirla fue una grata sorpresa.

Soy músico, y todo tipo demúsica termina siendo interesante si te gusta la producción o el audio en general. Esalgo que me interesa, y buscaré acercarme como usuario frecuente”, afirmó.

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