Una salida por pan terminó en tragedia: familia exige justicia tras atropellamiento y fuga
Una mujer pide que la muerte de su esposo no quede en el olvido.
Mexicali,B,C.-La noche del miércoles 15 de octubre cambió por completo la vida de Olga Francisca Ziga Luján y de sus tres hijos. Su esposo, Ramón Gilberto Vega Michel, salió de casa para ir por pan, una rutina cotidiana ligada al sustento familiar, pues ambos se dedicaban a vender tortas, gomitas y lo que estuviera a su alcance para salir adelante.
Minutos después de las siete de la tarde, el silencio y la tardanza encendieron la alarma. Vecinos comenzaron a gritarle que saliera: Ramón estaba tirado en la calle, gravemente herido, tras ser embestido por un vehículo cuyo conductor se dio a la fuga.
El hecho ocurrió en la zona de Villas del Arcón, al poniente de Mexicali, frente a un conjunto comercial donde hay negocios con cámaras que captaron los hechos.
De acuerdo con el testimonio de Olga, su esposo, de 37 años, circulaba en motocicleta por la vialidad principal cuando fue impactado por un Nissan Sentra verde que cruzó a toda velocidad y sin precaución.
El golpe fue brutal: la motocicleta quedó a varios metros de distancia, el pan regado sobre el asfalto y Ramón tendido, inconsciente, vomitando sangre, con severas lesiones en la cabeza y el rostro.
Calvario
La ambulancia tardó en llegar; cuando finalmente fue trasladado, su estado ya era crítico.
Ramón fue llevado al Hospital General, al no contar con seguro médico.
Permaneció cuatro días hospitalizado, la mayor parte del tiempo en coma. Pese a los esfuerzos médicos y a la esperanza de su familia, falleció la madrugada del domingo, a las 4:17 horas, a consecuencia de un traumatismo craneoencefálico severo.
Tenía apenas 37 años y, como lo describe su esposa, estaba lleno de planes y proyectos para su familia.
Mientras Olga permanecía al lado de su esposo, familiares y vecinos intentaron ayudar a localizar al responsable.
Hubo versiones de que cámaras de negocios cercanos captaron al conductor minutos antes del atropellamiento, pero no todos los establecimientos facilitaron los videos.
El vehículo presuntamente involucrado fue localizado horas después, abandonado en terrenos cercanos, aunque Olga tiene la certeza de su identidad, al confirmar con vecinos de la zona y encargados de la farmacia donde el sospechoso realizó una compra antes de conducir de manera imprudente.
También cree que el propietario del domicilio donde él rentaba, lo está encubriendo y aún no ha sido llamado a declarar sobre el caso.
La mujer denuncia que la respuesta institucional de la Fiscalía General del Estado ha sido lenta y fragmentada.
Asegura que, pese a que se le informó sobre una orden de aprehensión, no ha tenido certeza ni seguimiento claro del avance del caso con NUC 0202-2025-29026.
Incertidumbre
Hoy, Olga enfrenta el duelo y la crianza de tres hijos, una niña de siete años y dos adolescentes, con la sensación de haber quedado a la deriva.
Su hija menor sufre crisis emocionales, y ella misma reconoce que hay días en los que levantarse es una batalla.
Aun así, insiste en no rendirse. Su llamado es que la Fiscalía no permita que el caso se archive, que se ubique y detenga al responsable, y que la muerte de Ramón no sea “un caso más”.
“Mi esposo no merecía morir así. Salió a traer pan para su familia y no volvió. Lo único que pido es justicia”, expresa.
También hace un llamado a la ciudadanía: cualquier persona que tenga información sobre el conductor puede ayudar de forma anónima.
Para Olga, dar con el responsable no es solo un acto de justicia, sino una forma de proteger a otras familias y de darle a sus hijos la certeza de que la vida de su padre sí importa.
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