Desde la DSPM, mujeres ayudando mujeres

Mexicali, B.C.- A pesar de haber ingresado a los 39 años a la Policía Penitenciaria, Elizabeth Salas ha logrado destacar en las agencias de la ley, pues ahora se encuentra en la Policía Municipal de Mexicali, protegiendo a otras mujeres.

Su ingreso a las filas de la Ley se debió a su interés en la figura policial, que en los últimos tiempos ha mejorado en su estándar físico, es decir, presentaba un reto y exigencia, las cuales asumió a pesar de su edad.

La oficial Salas se encuentra ahora al frente de la Unidad de Órdenes de Protección y Medidas Cautelares de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, corporación en la que lleva 8 años en servicio.

Primero inició como operadora del C4, despachando llamadas de emergencia a otros agentes, luego fue comisionada a la Unidad de Atención a Personas en Estado de Vulnerabilidad, donde desarrolló su habilidad para conectar con las víctimas.

Su unidad se encarga de brindar vigilancia y seguimiento de las medidas de protección dictadas por la Fiscalía General del Estado o por un Juez de Control.

Las víctimas son en su mayoría mujeres, que se encuentran enfrentando un proceso por violencia familiar, sin embargo, la labor de Salas va más allá de visitarlas.

También se les canaliza a otras instituciones de asistencia, orientación respecto a su caso, se dan avisos a FGE sobre posibles riesgos, pero sobre todo, es brindarle un hombro para llorar, hasta simplemente escuchar a las víctimas.

Salas asegura que más del 60% de las mujeres víctimas son por casos de violencia familiar, en los que algunas de ellas siguen viviendo con los imputados, lo que en ocasiones dificulta brindarles la ayuda.

“Hay mujeres que sufren violencia física, que encontramos con ojos morados o la mandíbula quebrada, y así siguen con los agresores”, comentó.

“Si las salvamos a ellas, salvamos a toda una familia, que sus hijos no sean agresores o víctimas, que aprendan a no normalizar una conducta violenta”, recalcó.

Por estas circunstancias, la oficial Salas considera como gratificante su trabajo y la importancia del acercamiento con las víctimas, pues en algunos casos esto incrementa la confianza de otras mujeres que se animan a denunciar.

“Se sienten apoyadas por una mujer, con otra perspectiva, se sienten en confianza que a lo mejor no le contarían a un hombre, hablamos sobre opciones de empleo para sostener a sus hijos, si se sale de casa, quién cuida a los hijos, sienten más empatía con una mujer”, comentó.

“Me siento orgullosa de pertenecer a la DSPM, ayudas a muchas personas, tu propósito es ayudar, ya sea a personas en conflicto con la ley o a las víctimas”, dijo. “A las mujeres les digo que no tengan miedo, con todas las limitacones que la sociedad nos impone, así salimos adelante, y podemos triunfar y destacar en un ámbito a pesar de la edad o del sexo”.

A las víctimas les recordó la importancia de cortar con el ciclo de la violencia. “Hay muchas opciones para salir adelante, les pido que tengan la confianza en nosotros, que los vamos a ayudar”, concluyó.