Fuyu Kiyota: un siglo de amor, enseñanza y servicio

MEXICALI, Baja California.- Con aprecio, respeto y rodeada de sus seres queridos, la señora Fuyu Kiyota festejó sus 100 años de vida, de los cuales la mayor parte los vivió en Mexicali.

Fue en la Asociación Mexicano-Japonesa donde sus hijos y hasta bisnietos rindieron homenaje a quien ha dejado un legado no solo en la familia Kiyota, sino en la ciudad, pues ha sido promotora de la hermandad entre las dos naciones.

Yasushi Takase, embajador de Japón en México también formó parte de la celebración, pues le entregó un reconocimiento enviado por Shinzo Abe, primer ministro de Japón por haber cumplido un siglo de vida además de reconocer su trabajo en la región.

Orígenes

Nacida en la Prefectura de Kumamoto, Japón el 2 de enero de 1920, Fuyu Kiyota a través de un cortometraje, se narró parte de su vida y su llegada a Mexicali, donde conoció a su esposo quien era 17 años más grande que ella.

Señaló que desde que estaba en Japón, siempre tuvo la inquietud de conocer el continente americano, para poder trabajar y ayudar a su madre, pues su padre falleció cuando ella estaba en 3ro de primaria.

Indicó que al llegar a Mexicali, vivió en el ejido El Mayor en una casa hecha de la planta cachanilla, pero al estallar la segunda guerra mundial, tuvieron que irse a vivir a la Ciudad de México.

Impulsora de la cultura japonesa

Claudia Susana Kiyota quien es la directora del centro de idiomas y nieta de la señora, contó que al regresar su abuela a Mexicali igual que otros japoneses después de que terminó la guerra, se pensó en tener un espacio para su comunidad.

Comentó que su abuela ha sido una de las promotoras de enseñar la cultura japonesa y preservar sus usos y costumbres, además de tener siempre presente el significado de la familia en su persona.

Puedo decir que mi abuela ha sido una mujer que nos ha enseñado muchos valores como el valor del servicio pues a ella siempre le gustó ayudar a la gente".

"En mi caso puedo decir que ella siempre procura a los demás y cuando alguien se le acercaba lo atendía, pues aquí en la asociación ella era quien enseñaba las danzas japonesas".

"Así que puedo decir que estamos muy orgullosos de ser parte de su gran familia", mencionó.

Amor y enseñanza

María del Carmen Kiyota, hija de Fuyu y quien estaba charlando con las amistades familiares, indicó que su madre ha sido una persona fuerte que solo ha dado amor y enseñanza a la familia.

Recordó que cuando era niña su madre siempre la consentía con su comida favorita, pues siempre fue una persona muy amorosa, haciendo que ella la quisiera mucho.

"Mi madre siempre ha sido una persona muy trabajadora, alguien de casa que siempre vio por todos nosotros cuando inició con las tintorerías, así que ella se merece todo el respeto", expresó.

Orgullo Kiyota

Jorge Kioshi Osuna Kiyota quien es uno de los bisnietos, agregó que para él apellidarse Kiyota es de gran orgullo, pues sabe la historia de su bisabuela y el legado que deja eso en su familia.

"Llegar a los 100 años de edad no es algo fácil, pues ha visto y vivido cosas fuertes que la han hecho salir adelante a pesar de que en un principio desconocía el idioma en Mexicali".