¿Cómo saber si mi hijo ha sufrido abuso sexual?

Cada año llegan cientos de denuncias a las autoridades de seguridad por ataques sexuales contra menores, al ser en su mayoría provenientes de una persona cercana a la familia nuclear, es que emitieron las recomendaciones para prevenirlo y detectarlo.

Hermelinda Sánchez Pacheco, coordinadora de la Unidad Investigadora en Delitos contra la Libertad Sexual y la Familia, precisó los principales indicadores de que un menor fue víctima de un ataque sexual.

Los padres de familia deben de observar los cambios de actitud extremos en su carácter, declaró Sánchez, ya que el menor suele volverse muy pasivo o todo lo contrario, desarrollando una actitud agresiva.

Algunas condiciones físicas que podrían alertar a un adulto, es que el menor tenga descontrol de su esfínter, es decir, el niño o niña comienza a defecar en cualquier momento o circunstancia.

Además suelen presentar infecciones en vías urinarias, comienzan a bañarse constantemente, no quieren ir a ciertos lugares, no quieren permanecer sentados, se aíslan y tienen problemas para relacionarse con otros niños.

Comentó que suelen presentar rasguños y moretones inexplicables, se comen las uñas, todo lo secundario a la ansiedad, dificultad para hablar, los adolescentes se descuidan físicamente y caen en depresión.

“Si un niño que era tranquilo de pronto se porta agresivo, ese es un indicador, aunque no forzosamente de una agresión sexual”, comentó la servidora pública de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

“Entre más cercanos seamos a los hijos, más confianza habrá para comentar estas situaciones, se debe de propiciar que el menor sienta seguridad de externar sus problemas”, explicó.

Debe haber confianza en lo que dicen, argumentó que los menores difícilmente van a hablar de comportamientos sexuales, si no lo ha vivido, por eso siempre se le debe de creer, al igual con los adolescentes.

Los niños sufren una afectación emocional muy importante tras un ataque sexual, por lo que se deben de canalizar a asesorías de psicología, de lo contrario podría desarrollarse con problemas emocionales.

Recordó que los agresores sexuales son gente cercana, que entra y sale de la casa como cualquier miembro, por eso hay que fijarse muy bien a quien van a permitir que se acerque con el fin de prevenir estos ataques.

Entre las resoluciones del año 2017 a la fecha, la PGJE ha logrado la sentencia de 50 agresores sexuales de menores en Mexicali, en juicios orales y abreviados o procedimientos abreviados.

Sin embargo la cifra contrasta con las 652 denuncias interpuestas en el año 2017 y las 39 denuncias en lo que va del año 2018 a nivel estatal, la capital concentra alrededor del 32% de los casos.

Finalmente, Sánchez precisó que la violación equiparada está penada con doce a 22 años de prisión, y el abuso sexual con cuatro a ocho años de prisión.