Pierde familia su negocio y a ocho de sus integrantes por Covid-19 en Arizona

ARIZONA.- La historia de una familia que tras vivir el “sueño americano” perdió su negocio y la vida de ocho de sus familiares, y todo, a causa del coronavirus.

En un artículo publicado por la cadena CNN, relatan que en el transcurso de diez años, la familia desarrolló su negocio, pasando de vender tamales en la parte trasera de una minivan a manejar un popular camión de comida y un exitoso negocio de catering en Phoenix –Tamales y Tacos Puebla–, con una larga lista de clientes corporativos y de bodas.

El problema comenzó cuando empezaron a imponer restricciones a las empresas y pedir a las personas que se quedaran en casa en un esfuerzo por detener la propagación del coronavirus. El negocio se agotó en marzo.

A pesar de todas las precauciones contra el virus, un miembro de la familia se enfermó y varios siguieron, muriendo hasta hoy día ocho de ellos.

“No quiero llorar, porque sé que Dios tiene algo mejor para mí, dijo a la cadena noticiosa Ricardo Aguirre, de 42 años.

Cocinar está en el ADN de la familia; el abuelo de Aguirre tenía una panadería en la Ciudad de México y era conocido por su pan francés y su abuela era chef en un café en Sanborns, una popular tienda departamental.

Los tamales, un plato estrella en el menú de Tamales y Tacos Puebla, eran de una receta familiar que los Aguirre dicen haber perfeccionado.

Pero pocos segundos después del cierre, los clientes comenzaron a cancelar, se quedaron sin recursos y abrieron una cuenta de GoFundMe con la esperanza de recibir ayuda para reiniciar el negocio el 5 de Mayo.

Pero los miembros de la familia comenzaron a tener síntomas de Covid-19. Aguirre, su esposa, sus padres y dos de sus tres hijos estaban infectados.

Su madre y su padre tuvieron largas estancias en el hospital y finalmente fueron intubados. Aunque en un momento parecía estar mejorando, el padre de Aguirre murió el 11 de septiembre.

Su madre todavía tiene problemas pulmonares a causa de la enfermedad, dio a CNN.

Los miembros de la familia fueron cuidadosos, usaron máscaras y usaron desinfectante de manos constantemente, y Aguirre dice que no tiene idea de cómo contrajeron el virus.

El camión de comida de la familia fue embargado y Aguirre también perdió la cocina de preparación y sin seguro médico enfrentan cientos de miles de dólares en facturas médicas, las cuales se acercan a un millón.

El próximo mes, los Aguirre esperan a su primera hija, y llevará el nombre de su abuela y su abuelo: Guadalupe de Jesús.

“Estábamos listos para tener un nuevo bebé, porque sentíamos que estábamos preparadas económicamente y emocionalmente preparadas para cuidar de otro ser humano», dijo Aguirre.