Cinco amigos salvan a una adolescente de un presunto violador que la arrastraba a un callejón en Inglaterra; condenan al agresor

INGLATERRA.- Un grupo de cinco amigos en Inglaterra salvó a una adolescente de 17 años de un presunto violador que la arrastraba por un callejón.

Este grupo, que regresaba de cenar en un restaurante chino, persiguió y detuvo a Ryan Bennison, de entonces 23 años, después de que lo vieron sujetando a la víctima y tapando su boca mientras ella trataba de gritar pidiendo ayuda.

Durante la persecución en la localidad de Ashton-under-Lyne, uno de los integrantes del grupo se quedó atrás para consolar a la angustiada jovencita, mientras que los demás alcanzaron a Bennison y se sentaron sobre él hasta que llegó la policía.

Ahora, Bennison ha sido encarcelado durante seis años y medio después de que admitió un intento de violación, cuatro años después del ataque.

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Esta agresión se registró a las 23:00 horas del 1 de febrero de 2019, mientras la víctima se dirigía a su casa en medio de la nieve para ver a su hermano. Bennison se acercó a ella y le pidió un cigarrillo, ella se lo dio antes de irse y, más tarde, el hombre regresó para pedirle ayuda nuevamente con un encendedor.

Terminaron compartiendo un cigarrillo y el acusado la besó, según declaró al tribunal. Adam Watkins, el demandante, señaló que: "Al principio ella le devolvió el beso, durante un par de segundos y luego no supo qué hacer".

Ella estaba tratando de apartar la cabeza de él y se sentía incómoda. Parecía borracho. Ella no quería tener contacto sexual con él. La besó en el cuello cuatro o cinco veces y también la lamió”, precisó Watkins.

A pesar de los intentos de la joven por alejarlo, Bennison también comenzó a tocarse el área de la ingle. Cuando ella le dijo que tenía que volver a casa, él le preguntó si podía ir, pero ella se negó, señalando que ni siquiera lo conocía. La chica logró alejarse, sin embargo, cuando pasó por un callejón, el acusado la agarró del brazo y comenzó a tratar de arrastrarla hacia adentro.

Se salvó cuando un grupo de cinco hombres salió del restaurante Jade Gardens y se percató del sospechoso y la víctima desde el estacionamiento. Uno de ellos vio cómo el sospechoso tenía su brazo derecho alrededor del cuello de la víctima y su mano izquierda sobre su boca. En un momento, ella logró gritar mientras trataba de escabullirse.

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