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Boicot en Eurovisión 2026: España, Irlanda y Países Bajos se retiran tras aval de la UER a Israel en plena guerra de Gaza

La Unión Europea de Radiodifusión decidió mantener la participación de Israel en Eurovisión 2026 y aprobó nuevas reglas sobre la influencia de gobiernos en el concurso; como respuesta, varias televisiones públicas europeas anunciaron que no enviarán delegación al certamen que se celebrará en Viena

Boicot en Eurovisión 2026: España, Irlanda y Países Bajos se retiran tras aval de la UER a Israel en plena guerra de Gaza

GINEGRA.- La mayor controversia en la historia reciente de Eurovisión estalló tras una reunión en Ginebra, donde la Unión Europea de Radiodifusión (UER) decidió mantener la participación de Israel en el Festival de la Canción de Eurovisión 2026.

La resolución, tomada sin someter a votación la presencia de Israel, provocó la inmediata reacción de varias emisoras públicas europeas, según Reuters. Televisiones de España, Países Bajos, Irlanda y Eslovenia anunciaron que se retirarán del concurso en protesta por la guerra en Gaza y por considerar que se rompe la neutralidad que se exige al certamen.

La disputa llega en un contexto marcado por el conflicto entre Israel y el grupo palestino Hamás, que inició tras el ataque del 7 de octubre de 2023. Desde entonces, la guerra en Gaza ha dejado más de 70 mil personas muertas, según las autoridades sanitarias del enclave, y mantiene abierta una discusión sobre el papel de la cultura y el entretenimiento frente a las crisis humanitarias.

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¿Qué decidió la UER sobre la participación de Israel?

Tras la reunión celebrada en Ginebra el 4 de diciembre, la UER optó por no llamar a una votación formal sobre la presencia de Israel en Eurovisión 2026. En cambio, el organismo anunció la aprobación de nuevas reglas diseñadas para limitar la influencia de gobiernos y terceros en la promoción de las canciones participantes.

Estas modificaciones surgen después de acusaciones de que Israel habría impulsado de manera desproporcionada a su representante de 2025 para influir en la votación. La UER explicó que, a partir de ahora, cualquier miembro que quiera participar en Eurovisión 2026 deberá aceptar estas nuevas reglas y comprometerse a respetarlas.

La organización insistió en que el objetivo es proteger la neutralidad del concurso y mantenerlo como un espacio centrado en la música, pese a las tensiones políticas que rodean a algunos participantes.

¿Qué países se retiran de Eurovisión 2026 y por qué?

El anuncio de la UER tuvo un efecto inmediato. Las emisoras públicas de España, Países Bajos, Irlanda y Eslovenia informaron que se retirarán de Eurovisión 2026. Esto significa que las y los cantantes de esos países no competirán en el festival que se celebrará en Viena en mayo.

  • Irlanda: La emisora RTE declaró que considera “inadmisible” la participación del país “dada la terrible pérdida de vidas en Gaza y la crisis humanitaria que sigue poniendo en riesgo a tantos civiles”.
  • España: El director general de RTVE, José Pablo López, afirmó en X que lo ocurrido en la asamblea de la UER confirma que Eurovisión “no es un concurso de canciones, sino un festival dominado por intereses geopolíticos y fracturado”.
  • Eslovenia: RTV Eslovenia señaló que, junto con España, Montenegro, Países Bajos, Turquía, Argelia e Islandia, pidió una votación secreta sobre la participación de Israel. Esa votación nunca se llevó a cabo.

Islandia, por su parte, aún no define su postura. La emisora pública RUV indicó que su consejo de administración tomará una decisión en los próximos días sobre seguir o no en el concurso.

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¿Cómo influye la guerra de Gaza en esta disputa?

El debate sobre Israel en Eurovisión no es nuevo, pero la guerra de Gaza ha intensificado las posturas.

El conflicto se detonó tras el ataque del 7 de octubre de 2023 del grupo Hamás contra Israel, que dejó unas 1,200 personas muertas y 251 rehenes, de acuerdo con cifras israelíes. La respuesta militar en Gaza ha provocado más de 70 mil muertes, según las autoridades sanitarias del territorio.

Para varias emisoras europeas, este contexto hace incompatible una participación conjunta con Israel en un festival que busca proyectar unidad. La RTE irlandesa y RTVE han vinculado de forma explícita su decisión a la situación humanitaria en Gaza.

Al mismo tiempo, la participante israelí de 2025, Yuval Raphael, estuvo presente en el festival de música Nova, uno de los escenarios atacados el 7 de octubre. Esto también ha reforzado el vínculo entre el mundo musical y los hechos que dieron origen al conflicto.

¿Qué dice Israel y quién respalda su permanencia en el concurso?

Las autoridades israelíes celebraron la decisión de la UER. Tanto el gobierno como la oposición en Israel aplaudieron que el país mantenga su lugar en Eurovisión 2026.

Golan Yochpaz, director ejecutivo de la emisora pública KAN, calificó los intentos de excluir a Israel como una forma de “boicot cultural”. El ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Saar, fue más directo y sostuvo en X que “la vergüenza ha caído” sobre los países que decidieron retirarse.

El presidente Isaac Herzog agradeció públicamente a los miembros de la UER que apoyaron la participación de Israel y dijo que espera que el concurso siga defendiendo “la cultura, la música y la amistad entre las naciones”.

Alemania, uno de los patrocinadores clave del festival, también respaldó la resolución. Su ministro de Cultura, Wolfram Weimer, expresó que celebra que Israel continúe en el certamen y afirmó que “Israel pertenece al Festival de la Canción de Eurovisión como Alemania pertenece a Europa”.

¿Por qué este conflicto es tan importante para Eurovisión?

Eurovisión nació en 1956 “de las cenizas de la Segunda Guerra Mundial”, como recordó Martin Green, director del concurso. Su propósito original fue unir a Europa a través de la música y ofrecer un escenario de cooperación entre países.

Hoy, el festival alcanza a unos 160 millones de espectadores en todo el mundo, una cifra superior a los casi 128 millones que registró el Super Bowl estadounidense este año, según datos citados en el reporte. Esa magnitud convierte cada decisión en un mensaje simbólico con impacto internacional.

Ben Robertson, experto en Eurovisión del sitio de fans ESC Insight, señaló que la integridad del concurso está “en su punto más bajo”. A su juicio, nunca se había visto una división tan marcada entre los organismos de radiodifusión miembros de la UER.

Para muchos aficionados, la disputa actual abre una pregunta de fondo: hasta qué punto Eurovisión puede mantenerse como un espacio “neutral” cuando algunos participantes están inmersos en conflictos armados o en tensiones diplomáticas profundas.

¿Qué cambió en las reglas y qué puede pasar rumbo a 2026?

El principal cambio anunciado por la UER tiene que ver con la forma en que se promueven las canciones. Las nuevas reglas buscan impedir que gobiernos y actores externos utilicen recursos desproporcionados para influir en la votación del público o del jurado, tras las acusaciones que señalaron a Israel por su campaña en favor de su representante de 2025.

La UER explicó que todos los organismos de radiodifusión que quieran participar en Eurovisión 2026 deberán aceptar este marco. En teoría, cualquier país miembro puede sumarse si asume las nuevas condiciones, incluida la obligación de no politizar la promoción de su candidato.

Sin embargo, la retirada de España, Países Bajos, Irlanda y Eslovenia deja un vacío en la edición de Viena y abre la puerta a que otros países evalúen su postura. Algunos fans, como un seguidor de Tel Aviv citado en el reporte, lamentan que “otros países no vayan a competir el año que viene”; otros, como públicos en España, consideran que la decisión de mantenerse en el festival sería incompatible con la situación en Gaza.

¿Qué sigue para Eurovisión 2026?

Por ahora, el escenario es incierto. La organización logró que Israel permanezca en el concurso y, al mismo tiempo, asumió un costo en legitimidad ante una parte de sus miembros.

De aquí a mayo de 2026, la UER deberá gestionar tanto las posibles nuevas retiradas como las presiones para garantizar la neutralidad del festival. El reto será sostener el equilibrio entre un certamen musical que nació para unir a Europa y las tensiones geopolíticas que, cada vez más, se cuelan en el escenario.

Martin Green lo resumió al recordar el origen del concurso: Eurovisión “fue diseñado para unirnos” en un mundo complejo. El desenlace de esta crisis mostrará hasta dónde ese propósito sigue vigente cuando la política y la guerra cruzan el camino de la música

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