Trump busca que el estadio de los Commanders lleve su nombre tras acuerdo millonario entre el equipo y la ciudad de Washington: “sería un nombre hermoso”, asegura la Casa Blanca

Washington — La Casa Blanca expresó su apoyo a la idea de que el nuevo estadio del equipo de la NFL de Washington Commanders lleve el nombre del presidente Donald Trump. La declaración se dio luego de que un informe de ESPN revelara que un intermediario comunicó al grupo propietario del equipo el deseo de Trump de que el recinto lleve su nombre.

La secretaria de prensa del presidente, Karoline Leavitt, comentó que:

Sería un nombre hermoso, ya que fue el presidente Trump quien hizo posible la reconstrucción del nuevo estadio.

Trump podría presentar esta propuesta de manera pública el domingo 9 de noviembre, cuando asista al partido entre los Commanders de Washington y los Lions de Detroit en el Northwest Stadium, ubicado en Landover, Maryland. Durante el medio tiempo, se tiene previsto rendir homenaje a los veteranos estadounidenses.

¿Qué se sabe del nuevo estadio de los commanders?

El nuevo estadio forma parte de un acuerdo entre el equipo y el Distrito de Columbia, anunciado en abril pasado. Este acuerdo marca el regreso de los Commanders a la capital del país, en el mismo lugar donde estuvo el histórico Estadio RFK, escenario de tres victorias de Super Bowl en las décadas de 1980 y 1990.

Este acuerdo implica una inversión conjunta de casi 4 mil millones de dólares, donde:

• El equipo aporta 2,700 millones de dólares para la construcción del estadio.
• La ciudad invierte alrededor de 1,100 millones de dólares en infraestructura complementaria, como viviendas, áreas verdes y un complejo deportivo.

Los recursos públicos se destinarán a construir viviendas, espacios verdes y un complejo deportivo junto al río Anacostia.

La demolición del antiguo RFK Stadium ya comenzó, tras la aprobación del proyecto por el Consejo de la Ciudad de Washington D.C. en septiembre.

El papel del gobierno federal y la ciudad

Joe Biden firmó una ley a finales del año pasado que permitió transferir los terrenos federales donde se encontraba el antiguo estadio a la ciudad de Washington D.C. Esto abrió el camino legal para el desarrollo del nuevo complejo deportivo.

La alcaldesa Muriel Bowser, de filiación demócrata, ha respaldado el proyecto, aunque su oficina declinó hacer comentarios sobre la posibilidad de que el estadio lleve el nombre de Trump.

Por su parte, un portavoz de los Commanders informó a la agencia Associated Press (AP) que el equipo no tiene comentarios sobre la información difundida por ESPN.

El vínculo de Trump con los nombres y el deporte

Donald Trump ha sido conocido por usar su nombre en edificios, hoteles, campos de golf y productos de marca, como Biblias, relojes y colonias. Este interés en que su nombre aparezca en proyectos públicos o privados forma parte de su estilo empresarial y mediático.

En julio pasado, Trump amenazó con bloquear el acuerdo del estadio si el equipo no recuperaba su antiguo nombre “Redskins”, el cual fue retirado por considerarse ofensivo hacia comunidades nativas americanas.

Aunque el tema del nombre del equipo sigue siendo sensible, la posibilidad de que el estadio lleve el nombre de Trump podría reabrir el debate político y social sobre la influencia del presidente en el deporte profesional de Estados Unidos.

Posibles implicaciones de la propuesta

Si se concreta la propuesta, sería la primera vez que un estadio de la NFL lleve el nombre de un presidente de Estados Unidos. Además, el hecho podría tener repercusiones políticas y comerciales, tanto para el equipo como para la administración local, en medio de un contexto donde el deporte y la política siguen entrelazándose.

Por ahora, la decisión final no ha sido confirmada ni por el equipo ni por las autoridades de Washington D.C., y se espera que Trump mencione el tema durante su asistencia al juego del domingo.

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