Doble homicidio en residencia de ancianos: Ex empleado usó código de seguridad sin cambiar para acceder
Ex empleado de 22 años, Toya Kimura, es enviado a fiscales por el asesinato de dos mujeres de 89 años en una residencia de ancianos en Tsurugashima, cerca de Tokio.
TOKIO.- De acuerdo con The Mainichi, un joven de 22 años, identificado como Toya Kimura, fue entregado formalmente a la fiscalía el jueves por su presunta responsabilidad en el asesinato de dos mujeres de 89 años en una residencia de ancianos ubicada en Tsurugashima, prefectura de Saitama, cerca de Tokio. El sospechoso, quien fue empleado del centro hasta julio de 2024, aprovechó su conocimiento de los sistemas de seguridad para cometer el crimen.
El modus operandi: Una brecha de seguridad fatal
De acuerdo con fuentes investigadoras, Kimura accedió a la residencia de cinco plantas utilizando un código de seguridad de cuatro dígitos para abrir la cerradura electrónica. La investigación ha revelado que el código no fue cambiado después de que el joven dejara su empleo, lo que le permitió ingresar al edificio sin dificultad en la madrugada del miércoles.
Una vez dentro, las cámaras de seguridad lo grabaron caminando por las instalaciones sosteniendo un cuchillo, el cual, según la policía, había comprado antes del ataque. El personal del hogar geriátrico realizó una llamada de emergencia cerca de las 4:55 a.m. al descubrir a las dos víctimas.
Las víctimas y la confesión del sospechoso
Las mujeres fallecidas fueron identificadas como Toshiko Kobayashi y Akiko Uei, ambas de 89 años y residentes en el cuarto y quinto piso de la residencia, respectivamente. Los reportes policiales indican que ambos cuerpos presentaban múltiples heridas de arma blanca.
Kimura fue arrestado el mismo miércoles en una calle cercana al lugar, luego de que las cámaras de vigilancia lo captaran huyendo de la escena. El sospechoso ha admitido su participación en el asesinato de Toshiko Kobayashi y también ha indicado que tuvo un papel en la muerte de Akiko Uei.
Siguiendo declaraciones proporcionadas por el propio Kimura, la policía localizó una bolsa abandonada en una calle de Tsurugashima. En su interior se encontraron un cuchillo, una mascarilla y la ropa que presuntamente utilizó durante el violento ataque. Estos elementos se consideran pruebas fundamentales para el caso.
Fallas de seguridad bajo la lupa
La tragedia ha puesto una lupa sobre los protocolos de seguridad en las residencias para adultos mayores en Japón. El hecho de que los códigos de acceso no se actualizaran tras la salida de un empleado representa una falla crítica. El centro, que alberga entre 60 y 70 residentes y está situado en una zona residencial al sur de la estación Wakaba, cuenta con múltiples entradas, y se investiga si estas se encontraban debidamente aseguradas durante el incidente.
Este doble homicidio ha conmocionado a la comunidad local y ha generado una urgente reflexión sobre la protección de los vulnerables en instituciones de cuidado.
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