Tornados destruyen tres casas y desaparecen mascotas y ganado en reserva Navajo de Utah

SAN JUAN, Utah.- Al menos dos tornados tocaron tierra el pasado sábado por la tarde en el condado de San Juan, en el sureste de Utah, provocando la destrucción de varias viviendas, aunque afortunadamente no se reportaron víctimas humanas, informaron las autoridades.

El Servicio Nacional de Meteorología (NWS, por sus siglas en inglés) indicó que los tornados se formaron como resultado de una tormenta que azotó la zona durante aproximadamente una hora, comenzando alrededor de las 12:35 p.m.

Kris Sanders, meteorólogo de la oficina del NWS en Grand Junction, Colorado, explicó que los fenómenos probablemente recorrieron menos de 10 millas (16 kilómetros), aunque aún se desconoce su trayectoria exacta y la velocidad de sus vientos.

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“Es bastante inusual que esto ocurra en esa parte de Utah”, señaló Sanders en una entrevista telefónica. El meteorólogo añadió que desde 1950 solo se han confirmado dos tornados en esa área. Un equipo de evaluación podría realizar una inspección en la zona este lunes para determinar la intensidad y el camino de los tornados.

Desde 1950 solo se han confirmado dos tornados en esa área

El Presidente de la Nación Navajo, Buu Nygren, confirmó a través de una publicación en redes sociales que al menos tres hogares en las inmediaciones de Montezuma Creek resultaron demolidos por los vientos. La Nación Navajo, la reserva indígena más grande de los Estados Unidos, se extiende por partes de Utah, Arizona y Nuevo México.

El Departamento de Policía de la Nación Navajo emitió un comunicado en el que confirmó que no se reportaron heridos, aunque un número no especificado de animales de granja y mascotas se reportaron desaparecidos tras el evento.

Imágenes difundidas por la policía muestran una imponente columna de tornado rodeada de nubes oscuras, así como una vivienda reducida a escombros y rodeada de restos dispersos.

Las autoridades locales y tribales continúan evaluando los daños y prestando asistencia a las familias afectadas. La comunidad, aunque afectada por la destrucción material, respira aliviada ante la ausencia de pérdidas humanas en un evento natural de esta magnitud.