Defensores y políticos piden la prohibición de las armas de asalto tras tiroteo en escuela católica en EEUU

ESTADOS UNIDOS.- El alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, y la representante demócrata por Minnesota, Ilhan Omar, se unieron este martes a defensores y legisladores estatales para exigir una reforma legislativa en materia de armas.

La petición busca poner fin al estancamiento político que, aseguran, ha impedido avanzar hacia una regulación más estricta.

Durante su discurso, Frey pidió a los líderes locales y nacionales encabezar la iniciativa para prohibir las armas de asalto, subrayando que el debate lleva años sin resultados.

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“Necesitamos acción a nivel federal. Necesitamos acción a nivel estatal. Necesitamos coordinación con las ciudades de todo el país para asegurar que todas las personas tengan esta base común de seguridad que les permita enviar a sus hijos a la escuela con la confianza de que estarán seguros”, declaró.

Armas de guerra en las calles

Leah Kondes, representante de la organización Moms Demand Action, calificó las armas de asalto como “armas de guerra” y advirtió sobre los riesgos de su fácil acceso en la vida cotidiana.

El planteamiento fue retomado por Omar, quien compartió su experiencia personal vinculada a la violencia.

La congresista recordó que de niña sobrevivió a la guerra en Somalia, su país natal, y comparó esa realidad con la violencia armada en Estados Unidos.

“Nunca imaginé que llegaría a Estados Unidos, estaría en la preparatoria y que habría un tiroteo escolar, y que yo, mis hijos y yo practicaríamos simulacros escolares para evitar ser baleados en una de las naciones más grandiosas del mundo. Hay algo fundamentalmente roto”, expresó.

Un debate que sigue abierto

La exigencia de Frey, Omar y activistas locales se suma a los múltiples intentos en el Congreso por restringir el acceso a armas de asalto, propuestas que han enfrentado fuerte oposición política.

Mientras tanto, organizaciones civiles insisten en que la falta de medidas mantiene a las comunidades en riesgo de nuevos episodios de violencia armada.

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Un ataque con trasfondo ideológico

El director del FBI, Kash Patel, informó que la agencia cuenta con pruebas suficientes para determinar que el reciente tiroteo en Estados Unidos fue “un acto de terrorismo interno motivado por una ideología llena de odio”.

Patel detalló que el atacante dejó referencias anticatólicas y antirreligiosas tanto en un manifiesto como en las armas de fuego utilizadas.

Entre los hallazgos más preocupantes, reveló que en uno de los cargadores se encontró un “llamado explícito a la violencia contra el presidente Trump”.

Antisemitismo y consignas políticas

El director del FBI agregó que el tirador manifestó también un profundo odio hacia la comunidad judía, escribiendo frases como “Israel debe caer” y “Palestina libre”, además de incluir lenguaje explícito relacionado con el Holocausto. Estos mensajes refuerzan, dijo Patel, el carácter ideológico del ataque.

Investigación en curso

La agencia federal continúa recopilando pruebas y analizando los materiales incautados.

“La investigación está en curso y el FBI proporcionará actualizaciones cuando estén disponibles”, subrayó Patel.

“Hubo dos muertos: un niño de 8 años y otro de 10. Además, 14 niños y 3 adultos resultaron heridos.El tirador ha sido identificado como Robin Westman,un hombre nacido como Robert Westman. El FBI continuará brindando actualizaciones sobre nuestra investigación en curso al público a medida que podamos”.

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