Peruana que vive en EEUU fue a México de vacaciones, y al regresar es detenida por ICE frente a sus hijas; tiene un cargo de marihuana de hace 20 años

ESTADOS UNIDOS.- — Una madre peruana residente legal en Estados Unidos fue detenida por agentes federales de inmigración tras regresar de unas vacaciones en México con su familia, en un hecho que ha sido calificado como “brutal” e “injustificado” por sus abogados y legisladores.

Detenida frente a sus hijas

El 11 de agosto, Jemmy Jiménez Rosa, de 42 años, fue arrestada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en Massachusetts cuando regresaba al país junto a su esposo y sus tres hijas.

“La arrestaron frente a nuestras niñas. Ellas lloraban y se aferraban a ella. Tuve que decirles: ‘Tal vez no volvamos a ver a su mamá en este país’”, relató su esposo, Marcel Rosa, de 38 años, al diario Daily Mail.

Una condena de hace dos décadas

El motivo de la detención no se conoció de inmediato. Fue hasta el día de su liberación, el 20 de agosto, cuando ICE confirmó indirectamente que se debía a un cargo por posesión de marihuana de 2003, cuando Jiménez Rosa era estudiante universitaria.

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Ella se declaró culpable en ese entonces, completó la libertad condicional y el caso fue sellado hace más de una década. Además, en Massachusetts, la posesión de marihuana dejó de ser delito desde 2016.

“La detuvieron sin una base legal clara, le negaron atención médica y la trataron como criminal por un cargo que hoy ni siquiera es procesable”, denunció su abogado, Todd Pomerleau, quien logró que un juez anulara la antigua condena y presentó una moción para su liberación.

Diez días bajo custodia y sin atención médica adecuada

Durante los 10 días que permaneció detenida, Jiménez Rosa fue trasladada entre varios centros, incluyendo uno destinado únicamente a hombres.

Su familia denunció que no recibió el tratamiento necesario para su diabetes y asma, lo que obligó a hospitalizarla en dos ocasiones.

El abogado señaló que nunca se les mostró el expediente del caso:

“Sus registros estaban sellados. Las autoridades no debieron tener acceso a ellos, salvo que alguien los filtrara ilegalmente”.

Liberada en condiciones precarias

Tras su liberación, ICE no le devolvió teléfono ni transporte. Terminó en un restaurante en Burlington, a 30 millas de su casa (casi 50 km), desde donde pidió prestado un celular para contactar a su esposo.

“Estaba empapada por la lluvia, desorientada, llorando sin parar y apenas podía hablar”, relató Pomerleau. “Solo abrazaba a sus hijas y a su esposo, temblaba y no podía dejar de llorar”.

La detención provocó indignación entre funcionarios locales. El senador estatal Paul Feeney, presente en el reencuentro con la familia, declaró: “Encerrar a una madre residente legal y separarla de sus hijas no hace a nuestra comunidad más segura. Esto fue brutal y arbitrario”.

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Secuelas emocionales

La familia asegura que la experiencia dejó profundas heridas emocionales.

“Ya no es la misma. Llora todo el día. Necesitamos ayuda, todos la necesitamos”, confesó Marcel.

Actualmente, Jiménez Rosa recibe atención psiquiátrica y médica para enfrentar las secuelas. Además, se lanzó una campaña en GoFundMe que ya ha recaudado más de 14 mil dólares para cubrir gastos legales y de salud.

Su abogado prometió continuar la lucha legal:

“Cuando la aplicación de la ley viola la Constitución, todos estamos en riesgo. Si esto le puede pasar a una residente con Green Card que siempre cumplió, le puede pasar a cualquiera”.