Excavadora aplasta a hombre en situación de calle durante desalojo; la familia de este exige justicia
El informe de autopsia reveló que Taylor sufrió fracturas pélvicas, daños en órganos internos y hemorragias fatales.
ATLANTA, Estados Unidos.- La familia de un hombre sin hogar que murió aplastado en enero por una excavadora durante el desalojo de un campamento, presentó el viernes una demanda contra la ciudad de Atlanta, calificando su muerte como una “tragedia evitable”.
Cornelius Taylor, de 46 años, se encontraba dentro de su tienda de acampar cuando maquinaria pesada utilizada por empleados municipales destruyó el campamento ubicado cerca de la Iglesia Bautista Ebenezer, donde predicó Martin Luther King Jr., en preparación para el feriado en su honor. Según la demanda, presentada por su hermana y su hijo, las autoridades no verificaron si había personas en las tiendas antes de proceder con el operativo.
El abogado de la familia, Harold Spence, afirmó que la negligencia fue clara: “Una tienda ocupada por un ser humano fue aplastada. Eso es obviamente incorrecto. Si alguien se hubiera tomado diez segundos para revisar, esta tragedia pudo evitarse”.
La demanda, presentada en el Tribunal del Condado Fulton, exige una indemnización por gastos médicos, funerales y legales, además de un juicio con jurado. Incluye como demandados a la ciudad y siete empleados, entre ellos el conductor de la excavadora.
Respuesta de la ciudad y controversia
Un portavoz del alcalde Andre Dickens reconoció el incidente como “una tragedia”, pero se abstuvo de comentar sobre el litigio. Tras la muerte de Taylor, la ciudad implementó una moratoria temporal en desalojos, pero los reanudó meses después, con el polémico objetivo de “limpiar” el centro antes de la Copa Mundial de FIFA 2026.
Aunque la ciudad asegura colaborar con organizaciones para realojar a personas sin hogar, defensores y la familia de Taylor denuncian políticas inhumanas. “Atlanta tiene una crisis de vivienda. Desalojar campamentos sin soluciones reales solo empeora la situación”, señalaron abogados, quienes pidieron tratar a esta población con “respeto y dignidad”.
El dolor de una familia
En una conferencia de prensa, Darlene Chaney, hermana de Taylor, rompió en llanto al recordar las lesiones de su hermano, un ávido lector que “quería reconstruir su vida”. “Estamos aquí porque alguien fue perezoso”, afirmó. “Extraño sus llamadas semanales… Ahora solo tengo un hermano para molestarme”.
La Coalición Justicia para Cornelius Taylor sigue alojando a ocho exresidentes del campamento en hoteles y exige a la ciudad agilizar trámites burocráticos que obstaculizan el acceso a vivienda.
El caso reaviva el debate nacional sobre desalojos, tras un fallo de la Corte Suprema en 2023 que permite a las ciudades prohibir campamentos. Para activistas, la muerte de Taylor es un símbolo de lo que ocurre cuando las políticas priorizan la apariencia de una ciudad sobre vidas humanas.