Finge muerte de su abuela para no ir a trabajar; su jefe se conmueve y le manda un detalle que destapa su mentira; lo paga muy caro

CARACAS, Venezuela.- — Una joven se despertó sin ganas de ir a trabajar, como a muchas personas les puede pasar, sin embargo ella fue más lejos y pensó en una excusa para no presentarse en su empleo.

La joven informó a su jefe “mi abuela ha muerto” a través de un mensaje, como ocurre en varios trabajos con el fallecimiento de un familiar directo por ley te dan días de falta justificada, el plan le parecía perfecto, sin embargo la mentira le salió muy cara.

Ella confiaba en que con decirle no habría cuestionamientos de parte su jefe o algún contacto extra, sin embargo su jefe es de aquellos que se preocupan por las personas y sus situaciones por lo que conmovido pensó en enviarle un detalle ante lo que suponía era una dura perdida para su trabajadora.

Su gesto fue enviarle un arreglo floral, una corona fúnebre, para honrar la memoria de su abuela, pues quería que más allá de su apoyo sintiera algo tangible como solidaridad.

Sin embargo este acto de bondadad destaparía toda la verdad.

Envía la corona fúnebre a la joven y la desenmascara

El repartidor, ajeno a la historia detrás del pedido, llegó a la dirección indicada, listo para entregar lo que pensaba que sería un homenaje solemne. Pero cuando la joven recibió la corona de flores, su reacción fue de total sorpresa.

“Ni abuelita tengo”, dijo en voz baja, mirando el paquete que no había esperado en absoluto. Para ella, el regalo fue un recordatorio inmediato de su mentira, una mentira que hasta ese momento había sido su única defensa para faltar al trabajo.

La verdad se destapa

El repartidor, un joven curioso, vio no encajaba. Llamó al remitente para confirmar los detalles del pedido. La conversación fue rápida, pero la revelación fue contundente. La llamada desveló la verdad: la corona había sido enviada por el jefe de la joven.

El mismo jefe que, con todo el buen ánimo de un compañero de trabajo, había creído en la excusa y decidido ofrecerle ese pequeño gesto de consuelo. El repartidor, al enterarse de esto, se quedó atónito, mientras que la joven sentía cómo el peso de su mentira caía sobre ella.

Reacciones en redes y el final inesperado

La historia no quedó ahí. El repartidor, buscando compartir lo insólito de la situación, subió el video a TikTok, donde rápidamente se viralizó. Los comentarios no tardaron en llegar:

Una vez una compañera inventó que su mamá había muerto para faltar, y luego subió fotos de la mamá en la playa”, escribieron algunos usuarios, compartiendo historias similares.

Sin embargo, la gran mayoría no pudo dejar de pensar en lo que el jefe había hecho:

Nadie habla del jefe tan condescendiente que tuvo el detalle de enviar la corona, creo que la chica perdió un buen empleo”, comentó uno de los usuarios. La joven, finalmente, vio cómo su mentira se desmoronaba, y su jefe decidió tomar medidas al respecto.

El final de esta historia fue claro: tras el descubrimiento, la joven fue despedida por su falta de honestidad.

Una lección sobre la verdad y las consecuencias laborales

Este insólito incidente no solo dejó una historia viral, sino que también abrió un debate sobre la ética en el entorno laboral. ¿Hasta dónde puede llegar una mentira sin tener consecuencias? La joven descubrió, de la manera más dura, que las acciones tienen un impacto más grande del que a veces imaginamos.

Por otro lado, el jefe, aunque conmovido, entendió que su gesto de solidaridad había sido mal interpretado y que la confianza era un valor fundamental en cualquier relación laboral.

En redes, muchos se solidarizaron con el jefe, y otros defendieron al repartidor por cumplir con su trabajo sin tomar partido. Pero una cosa quedó clara: las mentiras pueden tener repercusiones inesperadas, y a veces la verdad, por más difícil que sea, siempre encuentra la manera de salir a la luz.