ICE detiene a exmilitar iraní que apoyaba las políticas migratorias de Trump; su esposa embarazada ruega por su liberación
Dificultades médicas del embarazo obligaron a la pareja a centrarse en la salud del bebé y postergar el trámite migratorio del futuro padre.

LOCUST, Alabama.- Ribvar Karimi, un exsoldado iraní de 26 años, fue detenido por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) el pasado 22 de junio, acusado de no haber ajustado su estatus migratorio tras ingresar legalmente a Estados Unidos con una visa K-1 en octubre de 2024, informó el portal de noticias Newsweek.
Su esposa, Morgan Karimi, ciudadana estadounidense y embarazada de siete meses y medio, asegura que la detención fue injusta y teme por la vida de su esposo si es deportado a Irán.
Karimi, originario de la región kurda de Irán, sirvió como francotirador entre 2018 y 2021 en el ejército de su país. Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), esto lo hace inadmisible bajo las actuales reglas migratorias.
La detención ocurre en un momento de alta tensión entre Washington y Teherán, tras recientes ataques ordenados por el presidente Donald Trump contra instalaciones nucleares iraníes y una campaña de redadas contra ciudadanos iraníes sin estatus migratorio actualizado.
Un matrimonio bajo presión
Morgan y Ribvar se conocieron en 2020 a través del videojuego Call of Duty y se casaron en enero de este año. Ella afirma que su esposo nunca ocultó su servicio militar obligatorio en Irán, y que entregaron voluntariamente toda la documentación requerida a las autoridades migratorias.
Según relató en entrevista con Newsweek, el proceso de ajuste de estatus ya estaba en marcha, pero fue retrasado por complicaciones en su embarazo. Los médicos detectaron líquido en los pulmones y el corazón del bebé, lo que obligó a la pareja a centrarse en su salud y postergar el trámite.
Todo el papeleo estaba listo. Íbamos a enviarlo tan pronto como naciera el bebé”, dijo Morgan. “No hay una fecha límite oficial para hacer el ajuste de estatus tras una visa K-1, solo que debíamos casarnos en los primeros 90 días. Cumplimos con eso. No pensábamos que estábamos violando la ley”.
Morgan también explicó que ICE visitó primero la casa de sus padres y luego llegó a su residencia. “Ribvar y yo los esperábamos en el porche. Cooperamos plenamente y entregamos todo”, aseguró.
Apoyo a Trump y desilusión
Morgan Karimi afirmó que tanto ella como su familia eran simpatizantes del expresidente Donald Trump. Incluso declaró que su esposo —pese a ser iraní— apoyaba sus políticas migratorias y creía que ayudarían a liberar al pueblo iraní del régimen.
Mi esposo siempre fue proestadounidense. Su primera compra aquí fue una bandera de Estados Unidos. El pastel de nuestra boda tenía esa bandera”, dijo.
Sin embargo, tras la detención de Ribvar, Morgan asegura sentirse traicionada por el sistema: “Estamos devastados. Creíamos que las políticas migratorias de Trump se enfocaban en criminales, no en personas como mi esposo, que lo arriesgó todo por estar aquí legalmente”.
Tensión internacional y redadas
La detención de Karimi no es un caso aislado. Según el DHS, el mismo fin de semana fueron arrestados otros 10 ciudadanos iraníes sin estatus migratorio regular. Esto ocurre en un momento en que el Gobierno estadounidense ha intensificado sus medidas contra inmigrantes iraníes, citando riesgos de seguridad nacional tras el conflicto con Irán.
Una portavoz del DHS defendió la medida y afirmó que se trata de una aplicación estricta de la ley. “No vamos a ignorar el estado de derecho. Hemos identificado y arrestado a extremistas violentos que ingresaron ilegalmente, ya sea bajo los programas de Biden o por otras vías”, dijo en un comunicado.
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