Harvard podrá seguir recibiendo estudiantes internacionales, a pesar de amenazas de Trump, dicta jueza
Una jueza federal bloquea indefinidamente la revocación de su programa para recibir alumnos extranjeros, mientras avanza el juicio.

ESTADOS UNIDOS.- — La Universidad de Harvard obtuvo una importante victoria legal este viernes, luego de que la jueza federal Allison Burroughs emitiera una orden judicial preliminar que impide al gobierno de Donald Trump revocar su certificación para recibir estudiantes y académicos internacionales.
La decisión bloquea indefinidamente la orden del gobierno emitida el 22 de mayo, que buscaba expulsar a la universidad del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVP, por sus siglas en inglés), administrado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
🚨NEW: Federal Judge Allison Burroughs has blocked the Trump Administration from prohibiting Harvard from hosting international students.
— Protect Kamala Harris ✊ (@DisavowTrump20) June 20, 2025
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¿Qué significa este fallo para Harvard?
La jueza Burroughs, nombrada por el expresidente Barack Obama, prohibió al gobierno implementar, mantener o aplicar la revocación del SEVP mientras el juicio continúa. El fallo:
- Permite a Harvard seguir recibiendo estudiantes internacionales.
- Evita que la revocación afecte solicitudes de visa o estatus migratorios.
- No impide que el gobierno revise el cumplimiento normativo de la universidad, pero no puede usar la revocación como argumento en su contra por ahora.
Un portavoz de Harvard declaró a Fox News Digital:
“La orden de la Corte permite a Harvard seguir inscribiendo a estudiantes y académicos internacionales mientras continúa el proceso judicial. Harvard seguirá defendiendo sus derechos, y los derechos de sus estudiantes y académicos”.
¿Qué alegó Harvard en su demanda?
La universidad presentó una demanda contra el Departamento de Seguridad Nacional poco después de la revocación. Según sus abogados, la decisión del gobierno fue arbitraria, motivada políticamente y en represalia por las críticas que la universidad ha hecho a la administración Trump.
La universidad sostiene que fue blanco de un “ataque retaliatorio” debido a sus posturas sobre la diversidad, la inclusión y la libertad académica.
Entre los principales argumentos presentados:
- Violación del derecho al debido proceso.
- Represalia contra la libertad de expresión, protegida por la Primera Enmienda.
- Incumplimiento de la Ley de Procedimientos Administrativos (APA).
- La medida fue parte de una campaña de represalias por posturas académicas de Harvard.
Harvard también advirtió que sin el programa SEVP, los estudiantes extranjeros quedarían fuera de la institución.
El fallo no impide futuras revisiones, pero detiene los efectos inmediatos
Aunque el fallo no impide que el gobierno continúe un proceso formal de revisión, sí prohíbe que se aplique la revocación del SEVP mientras el caso esté en curso. La jueza Burroughs aclaró en su orden que:
“Los demandados no tienen prohibido revisar el cumplimiento de Harvard con las regulaciones federales, ni solicitar información de forma rutinaria. Pero no pueden implementar ni aplicar la revocación del 22 de mayo”.
Trump sugiere posible acuerdo con Harvard
Pocas horas después del fallo, el presidente Trump publicó un mensaje en Truth Social insinuando que se podría anunciar un acuerdo con la universidad en los próximos días.
“Hemos estado trabajando de cerca con Harvard, y es muy posible que se anuncie un acuerdo la próxima semana. Si se concreta en los términos actuales, será un acuerdo histórico, y muy bueno para nuestro país”, escribió.
Trump también elogió la actitud de la universidad durante las negociaciones, señalando que sus autoridades “actuaron de forma extremadamente apropiada” y están comprometidas con “hacer lo correcto”.
Contexto: una serie de tensiones entre Harvard y la Casa Blanca
Este conflicto se enmarca en una serie de tensiones entre la universidad y la administración Trump. En meses recientes, funcionarios del gobierno acusaron a Harvard de no combatir adecuadamente el antisemitismo en el campus, y exigieron que eliminara lo que calificaron como “prácticas racistas de diversidad, equidad e inclusión”.
La orden judicial de este viernes no solo representa un respiro para los estudiantes extranjeros, sino también un precedente importante en la defensa de la autonomía universitaria frente a presiones políticas.
El caso continuará su curso en los tribunales, pero mientras tanto, Harvard podrá seguir recibiendo a estudiantes internacionales sin interrupciones.
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