Esquirla de bomba iba directo al pecho de un soldado, pero su celular la detuvo

El 6 de junio de 2025, en una posición del ejército de Ucrania cercana al frente oriental, una esquirla de artillería quedó detenida por la carcasa de un Samsung Galaxy S25 Ultra, salvándole la vida a su propietario.

Un blindaje inesperado

De acuerdo con el portal ucraniano Meza, el militar —cuyo nombre no fue revelado por razones de seguridad— relató en la página local de servicio técnico que la metralla atravesó la pantalla y se incrustó en el armazón de titanio del dispositivo, sin llegar a perforarlo por completo. “El teléfono se convirtió en una armadura que me protegió de lesiones graves”, escribió el soldado, lamentando únicamente haberlo usado “solo tres semanas” antes del impacto, según Naver News.

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Fotografías compartidas por sus compañeros muestran la pantalla astillada y el fragmento metálico alojado en la parte posterior, evidencia de la fuerza del bombardeo y de la resistencia del equipo.

Reacción del fabricante

La publicación se viralizó en foros de tecnología y redes sociales ucranianas en cuestión de horas, lo que motivó una respuesta inmediata del centro de atención al cliente del fabricante en Kiev. Un agente respondió directamente al comentario para agradecer “la dedicación de quienes sirven” y solicitó los datos de contacto del afectado para tramitar la reparación gratuita del dispositivo. En respuesta a consultas de medios locales, la oficina de relaciones públicas confirmó que correrá con todos los gastos como “gesto de reconocimiento por la confianza demostrada”.

Diseño y seguridad del dispositivo

Especialistas en materiales consultados por Meza atribuyen la inesperada protección a la aleación de titanio empleada en el marco y a la disposición interna de los componentes. La mayoría de los teléfonos de gama alta recurre hoy a metales ligeros combinados con refuerzos internos pensados para disipar calor; en este caso, esa estructura funcionó como un escudo improvisado. Ingenieros en defensa señalan, no obstante, que la capacidad de detener proyectiles depende de variables como el ángulo de impacto y la velocidad de la fragmentación, por lo que no debería considerarse un sustituto de equipo balístico certificado.

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Un conflicto prolongado

El incidente vuelve a subrayar la precariedad de las condiciones en que operan los soldados tras más de cuatro años de confrontación entre Rusia y Ucrania. Desde febrero de 2022, las líneas de contacto han experimentado un constante intercambio de artillería, con bombas de racimo y drones de reconocimiento cada vez más precisos. La historia del teléfono convertido en coraza se ha convertido en un breve respiro mediático dentro de un conflicto que, según organismos humanitarios, ya ha dejado decenas de miles de heridos.