Políticas de Trump hace que mujer transgénero pida asilo en Canadá luego de temer por su vida

ESTADOS UNIDOS.- Hannah Kreager, una mujer transgénero estadounidense de 22 años, presentó este lunes una solicitud de asilo en Canadá, alegando temor a la persecución en su país a raíz de las políticas impulsadas por el presidente Donald Trump desde su regreso a la Casa Blanca el pasado 20 de enero.

Su abogada, Yameena Ansari, confirmó la petición al diario canadiense The Globe and Mail, detallando que fue registrada ante el Consejo de Inmigración y Refugio de Canadá.

Ansari advirtió que las medidas adoptadas por la administración Trump, entre ellas la declaración oficial de que solo existen dos géneros —masculino y femenino—, han provocado un retroceso en las protecciones legales de las personas transgénero en Estados Unidos, detalló una nota de EFE.

Una de las consecuencias más directas ha sido la eliminación de la opción “X” como marcador de género en documentos oficiales como pasaportes, lo que afecta directamente a ciudadanos trans y no binarios.

Miedo a vivir bajo la nueva normativa

Kreager, quien actualmente reside en la ciudad de Calgary, expresó al mismo medio su angustia por la posibilidad de tener que renovar su pasaporte.

El documento que posee actualmente incluye una “X” en el campo de género, una opción que ya no está disponible bajo las nuevas regulaciones.

“Estaba muy estresada en Estados Unidos”, explicó la joven, justificando su decisión de abandonar el país y buscar refugio en Canadá.

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Reto legal al sistema migratorio canadiense

El caso de Kreager representa un desafío para el sistema de refugio canadiense, ya que Estados Unidos es considerado oficialmente por Ottawa como un país seguro para quienes temen persecución por razones de género, creencias o ideología.

Ambas naciones mantienen vigente desde 2002 el Acuerdo de Tercer País Seguro, que fue ampliado en 2023 para impedir la llegada irregular de solicitantes de asilo desde territorio estadounidense.

 Dicho acuerdo establece que los refugiados deben solicitar protección en el primer país seguro al que arriben.

Críticas de organismos internacionales

Organizaciones como Amnistía Internacional han cuestionado abiertamente este acuerdo y han instado a Canadá a suspenderlo, argumentando que no garantiza la protección adecuada para personas vulnerables, en especial ante contextos políticos hostiles como el que describe Kreager.

Por ahora, su solicitud iniciará un proceso que podría sentar precedentes sobre cómo Canadá aborda casos de asilo basados en identidad de género, provenientes de su principal aliado y vecino del sur.