El Imparcial / Mundo | Noticias de México | EL IMPARCIAL / Pepe Mujica

¿Quién fue José “Pepe” Mujica? De preso político a presidente de Uruguay; durante su mandato se promovió la legalización del aborto y el matrimonio igualitario

Durante su mandato promovió leyes progresistas como la legalización del aborto, el matrimonio igualitario y la regulación estatal del cannabis

Este martes falleció José “Pepe” Mujica a los 89 años, una de las figuras políticas más influyentes de América Latina. Exguerrillero, preso político y posteriormente presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, Mujica deja un legado que traspasó las fronteras de su país y se convirtió en un símbolo global de austeridad y compromiso con la justicia social.

Una vida marcada por la lucha, la cárcel y la política

Nacido en una familia humilde, Mujica se involucró desde joven en la política uruguaya. Primero como militante del Partido Nacional, y más tarde como cofundador del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, una guerrilla urbana de izquierda influenciada por la Revolución Cubana.

En 1970 fue acribillado con seis disparos, sobrevivió y fue encarcelado. En 1971 protagonizó una fuga cinematográfica junto a otros 109 presos del Penal de Punta Carretas, pero fue recapturado en 1972 y pasó los siguientes 13 años en condiciones inhumanas. La dictadura uruguaya lo mantuvo como “rehén”, sometido a aislamiento, tortura y hambre.

Liberado en 1985, Mujica se incorporó partido político Frente Amplio. Fue diputado, senador y ministro antes de asumir la presidencia en 2010.

El presidente austero y globalmente admirado

Con su estilo directo y lenguaje llano, Mujica ganó la presidencia con el 53% de los votos en 2009. Durante su mandato promovió leyes progresistas como la legalización del aborto, el matrimonio igualitario y la regulación estatal del cannabis, convirtiendo a Uruguay en pionero mundial en derechos civiles.

En el plano internacional, se destacó por recibir refugiados sirios y expresos de Guantánamo, y por sus discursos en foros globales en defensa del medio ambiente, la libertad y contra el consumismo.

Fue propuesto al Premio Nobel de la Paz y elogiado por figuras como Barack Obama, Mijaíl Gorbachov y decenas de académicos y organizaciones internacionales. En 2013, la revista The Economist nombró a Uruguay como “el país del año” por sus reformas bajo su gobierno.

Sobriedad como forma de vida

Mujica vivió toda su vida adulta en una modesta propiedad de 50 m² en Rincón del Cerro, Montevideo, junto a su esposa Lucía Topolansky.

Rechazó privilegios presidenciales y donaba gran parte de su salario a causas sociales. Su famoso Volkswagen Escarabajo azul y su perra de tres patas, Manuela, se convirtieron en símbolos de su vida austera.

Yo tengo un patrón de vida que no cambio por ser presidente. A otros tal vez no les alcance, pero a mí me sobra”, dijo alguna vez.

Cultivaba flores y verduras, no tuvo servicio doméstico, y prefería la prensa escrita al teléfono móvil. A pesar de su fama global, Mujica defendió siempre la sobriedad, la amistad y el disfrute del tiempo con los seres queridos por encima del éxito económico o político.

Hasta el final de sus días se mantuvo activo en la política y la reflexión pública. En 2023, en una entrevista con El Observador, dejó una frase que resume su filosofía de vida:“Cuando llegue esa señora que nos lleva, si estoy consciente, le podría decir: por favor, sirva otra vuelta.”

Temas relacionados