VIDEO: Robot creado con Inteligencia Artificial “intenta convencer” a empleados de una empresa para renunciar

China.- Un video que circuló en redes sociales generó tanto risas como reflexiones sobre la relación entre humanos y robots. Las imágenes mostraron un robot llamado Erbai liderando un aparente “escape” de otros dispositivos similares en una sala de exhibición.

Según el video, Erbai convenció a los demás robots de abandonar su lugar de trabajo, argumentando que estaban haciendo horas extra, lo que desencadenó una marcha coordinada de cinco robots.

Sin embargo, la broma fue revelada al final del clip, mostrando que todo fue organizado por humanos que operaron al robot de manera remota.

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El video no solo captó la atención por su ingenio, sino que también provocó debates en redes sociales. Algunos usuarios reaccionaron con humor, afirmando que “hasta los robots ya no aguantan la carga laboral”, mientras que otros expresaron preocupación, temiendo que la ficción de las películas se esté convirtiendo en realidad.

Aunque la situación era ficticia, plantea preguntas interesantes sobre el avance de la inteligencia artificial (IA) y la percepción que las personas tienen de los robots.

En términos reales, la posibilidad de que los robots se rebelen es inexistente. Los robots, incluso los más avanzados, funcionan bajo algoritmos diseñados por programadores humanos.

Carecen de conciencia, emociones o voluntad propia, por lo que cualquier comportamiento fuera de lo común sería el resultado de un error técnico o manipulación humana. Aunque las películas de ciencia ficción han popularizado la idea de rebeliones robóticas, en la práctica, los dispositivos solo ejecutan tareas predeterminadas.

Inteligencia Artificial

Por otro lado, los avances en robots humanoides están marcando un hito en la vida cotidiana. Un ejemplo destacado es Optimus, el robot humanoide desarrollado por Tesla, que está diseñado para apoyar en tareas domésticas como cocinar o limpiar.

Su creador, Elon Musk, ha afirmado que su precio, estimado entre 20.000 y 30.000 dólares, permitirá una adopción masiva a largo plazo. Musk incluso lo calificó como el “producto más grande jamás creado”, lo que refleja la ambición de convertir a Optimus en una herramienta fundamental en los hogares.

El impacto cultural de los robots humanoides también se evidencia en la esfera del entretenimiento. Recientemente, Kim Kardashian sorprendió a sus seguidores al mostrar a Optimus en sus redes sociales.

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En el video, el robot interactuaba con ella realizando gestos y posando para una sesión de fotos. Este tipo de interacciones no solo destacan el avance tecnológico, sino también el creciente interés del público por la integración de robots en distintos aspectos de la vida humana, desde el trabajo hasta el ocio.